Periodistas perseguidos
Los directores de dos periódicos de la oposición en la República Democrática del Congo se enfrentan a la pena de muerte. El crimen de Emile-Aimé Kakekese Vinalu fue escribir dos artículos en los que analizaba una pelea entre funcionarios de alto nivel, se quejaba de la desunión en la oposición y decía que los que hablaban con franqueza eran arrestados por crímenes contra la seguridad del Estado. El Gobierno de Kabila le demostró que tenía razón. Y Jean-Pierre Ekanga Mukuna fue arrestado, supuestamente por negarse a dar la dirección de la casa de Vinalu. (...) El periodista serbio Miroslav Filipovic está cumpliendo una pena de siete años por espionaje y difundir información falsa, tras escribir sobre los crímenes de guerra del Ejército yugoslavo en Kosovo. A medida que se acercan las elecciones parlamentarias en Azerbaiyán, las autoridades han arrestado al director de un periódico de oposición bajo las falsas acusaciones de que participó en un intento de secuestro. (...) El mundo está presenciando una epidemia de intentos por parte de los gobiernos de silenciar a los periodistas independientes, no tanto asesinándolos como a través del acoso legal y las amenazas físicas. La nueva represión es, en cierto modo, un signo de progreso. Azerbaiyán no perseguía a los periodistas independientes hace 10 años porque no tenía ninguno. (...) El respeto por una prensa libre viene con el desarrollo democrático y el crecimiento económico (...) Pero una prensa libre es también una parte integral de ambos tipos de progreso y hoy necesita más ayuda del exterior. (...)Nueva York, 6 de septiembre
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