Descartada la anulación del concurso de telefonía móvil multimedia
El presidente del Gobierno descartó ayer repetir el concurso por el que se concedieron las cuatro licencias de telefonía móvil multimedia en marzo, pese a la escasa recaudación obtenida en España frente a otros países como Alemania. José María Aznar alegó que la anulación, pedida por el PSOE, vulneraría "las reglas del Estado de derecho". Y argumentó que si se defiende que las operadoras deberían pagar más por dar ese servicio, quizá también tendrían que pagar por emitir las radios y televisiones, que usan el mismo espacio radioeléctrico.
El presidente fue contundente con la posibilidad de que se anule y repita el concurso por el que se concedieron cuatro licencias de telefonía móvil multimedia a Telefónica, Airtel, Amena y Xfera en marzo pasado. Eso "no se le ocurre a nadie", señaló durante la conferencia de prensa posterior al Consejo de Ministros, porque afectaría "a las reglas de un Estado de derecho".El Gobierno, y Aznar volvió a hacerlo ayer, siempre ha defendido el sistema de concurso por varios motivos, entre ellos que por ese procedimiento, que se basa en criterios técnicos y compromisos de inversión, se garantiza, en teoría, el mejor servicio para el consumidor. "En España es tradicional el método de concurso", afirmó ayer el presidente. Era necesario para poner en marcha la "sociedad de la información", término que emplea el Gobierno para referirse a las nuevas tecnologías e Internet, y beneficiar a los usuarios con tarifas "razonables". España fue el primer país europeo, tras Finlandia, que adjudicaba las licencias de la telefonía móvil que permitirá el acceso de alta velocidad a Internet.
Pero el planteamiento le ha fallado al Gobierno en un punto: el económico. Las arcas públicas españolas recaudaron 86.000 millones de pesetas por esas cuatro licencias, mientras que otros países que han elegido al sistema de la subasta tras el concurso español han conseguido recaudaciones billonarias, como Alemania (ingresó 8,4 billones de pesetas) y el Reino Unido (6,5 billones). Este dinero se destinará a sanear las cuentas públicas. Además, las inversiones que el consorcio en el que participa Telefónica realizará en el país centroeuropeo son similares a las se ha comprometido a desarrollar en España.
La diferencia de recaudación ha levantado la polémica. Hasta Elvira Rodríguez, secretaria de Estado de Presupuestos, ha admitido esta semana que un dinero extra no le habría venido mal a las arcas públicas. España podría haber recogido al menos tres billones de pesetas por las licencias, según algunas estimaciones.
Las compañías adjudicatarias de las licencias españolas ya han advertido de que, si tuvieran que pagar más, no tendrían más remedio que revisar sus planes de inversión. "Lo que hace falta es que los compromisos de inversión, desarrollo, creación de puestos de trabajo y compromisos de avance tecnológico se pongan en marcha", advirtió Aznar a las operadoras.
Además, el Gobierno ha comenzado el nuevo curso político con una meditación, originada por la baja recaudación que obtuvo España por el UMTS, pero que va más allá de las operadoras de telecomunicaciones que consiguieron una. Un debate que antes no existía: "Cobrar por la utilización del espacio radioeléctrico", afirmó Aznar.
Al presidente le llama la atención la intensidad de las críticas contra el concurso español, porque pagar por utilizar el espacio radioeléctrico (medio por el que se transmite tanto voz como datos o imágenes) "no significa pagar sólo por los teléfonos, sino por toda la utilización de ese espacio: radios, televisiones y por todo lo que no es telefonía". "Sobre este debate el Gobierno va a reflexionar, y que cada uno toque el tambor como quiera".
Aznar no dijo más. Si se tiene en cuenta que las operadoras pagarán un canon del 1,5 por mil de su cifra de negocio anual para explotar la tecnología UMTS, la misma idea se puede trasladar a los medios de comunicación: pagar para emitir. Pero sólo es una "reflexión".
No sólo se habló de telefonía móvil. El Gobierno será "beligerante" para controlar la inflación, el principal quebradero de cabeza del Ministerio de Economía. La tasa interanual de la inflación de julio se situó en el 3,6%, muy por encima del objetivo del 2% fijado este año. El presidente atribuyó el descontrol inflacionista a la escalada de los precios del petróleo -que se ha encarecido un 30% desde enero- y al crecimiento de la economía española, por encima de la media de la Unión Europea.
Los precios dependen de todos, recordó Aznar, que pidió a los empresarios del sector servicios, en especial a los del turismo, que reflexionen "sobre su espectacular desarrollo, sus importantes beneficios" y colaboren en la contención de la inflación.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
- UMTS
- Declaraciones prensa
- Discursos
- Licencias telefonía
- José María Aznar
- Operadores telefonía
- Conferencias
- PP
- Radio
- Partidos políticos
- Política económica
- Gente
- Televisión
- Telefonía móvil
- Tecnologías movilidad
- Eventos
- Medios comunicación
- Telefonía
- Tecnología
- Comunicación
- Política
- Telecomunicaciones
- Economía
- Comunicaciones
- Sociedad