El juez Oubiña pone en libertad bajo fianza a los acusados por el crimen de la Villa Olímpica

El juez Adolfo Fernández Oubiña decretó ayer la libertad bajo fianza de hasta 750.000 pesetas de los 10 jóvenes procesados por la brutal muerte de Carlos Javier Robledo, ocurrida el pasado 1 de abril en la Villa Olímpica. El titular del Juzgado de Instrucción número 14 de Barcelona alega en el auto "el retraso en la tramitación de la causa, debido exclusivamente a la dificultad de práctica de pruebas científicas, según consta en reiteradas diligencias reclamándolas". Según fuentes judiciales, se trata de unas pruebas sobre las botas que presuntamente emplearon los acusados para patear a la víctima.

Fianzas asequibles

Por este único motivo, el juez decreta la libertad provisional de los procesados. Nueve podrán abandonar la prisión tras pagar una fianza de 750.000 pesetas y el décimo sólo deberá depositar 250.000. Los acusados, que permanecían en prisión desde el pasado mes de abril, deberán comparecer en el juzgado los días 1 y 15 de cada mes y siempre que sean citados. El bufete de la abogada Cinta Caminals, que representa a la familia de Carlos Javier Robledo, anunció la "inmediata" presentación de un recurso contra el auto de libertad decretado por el magistrado. Los abogados de la familia de la víctima se quejan de la puesta en libertad de los acusados "tan sólo cuatro meses después de los hechos y mediante un auto huérfano de razonamientos" y han anunciado que se entrevistarán con Manuela de Madre, alcaldesa de Santa Coloma de Gramenet, donde residía el fallecido, para que reaccione ante la decisión judicial.

Las fianzas son mucho más asequibles que la responsabilidad civil de 200 millones de pesetas que les fue impuesta por el propio Fernández Oubiña y que fue rebajada por la Audiencia de Barcelona a 75 millones. La decisión del juez choca con el propio auto de procesamiento, dictado a finales de mayo, en el que aseguraba con contundencia que los acusados eran un "peligro concreto para la vida de cualquier ciudadano". Al hilo de este crimen, el juez reflexionó sobre el fenómeno de la violencia juvenil y comentó a diferentes medios de comunicación que "hace tiempo, se rodó una película, La naranja mecánica, que era una auténtica profecía y un aviso sobre las posibles alteraciones de la vida social, derivadas de lo que se llamó la civilización del ocio y del dinero", al tiempo que abogaba por el cumplimiento íntegro de las penas para este tipo de agresores. Los 10 procesados, que ingresaron en prisión entre el 13 y el 15 de abril pasados, acusados de un asesinato y de otros dos asesinatos en grado de tentativa y robo, son V. M. G., J. G. N., alias Curro o el Peca; J. M. F. G. Juanma; R. A. R. I. Falito; D. M. H. Gusi; J. M. C. Montalvo; D. G. G. David; D. A. J. C. El Chino; I. M. F. Sito, J. de la R. L. Jonatan y, en su mayoría, residen en el barrio de La Mina de Sant Adrià de Besòs.

Según el auto de procesamiento, los acusados acordaron "agredir a grupos o individuos que pasaran por las proximidades" del after-hours Back Fire de la Villa Olímpica barcelonesa.

La alcaldesa de Santa Coloma de Gramenet declaró ayer que si los procesados quedan en libertad, el Ayuntamiento, que forma parte de la acusación particular junto con el consistorio de Barcelona, presentará recurso contra la decisión del juez. De Madre hizo estas declaraciones durante uno de los actos de inicio de la fiesta mayor de Santa Coloma de Gramenet.