Ni oxígeno, ni comida, ni calor
Tripulantes del submarino en tierra relatan las condiciones de vida y seguridad en el interior del 'Kursk'
ú"¿Por qué los marinos no evacuaron el Kursk? Simplemente, porque no recibieron la orden". Así lo explica Alexéi Bressel, un suboficial que debió embarcarse en el submarino ruso accidentado. Pertenece a la tripulación del Vorónezh, pero varias veces había sido enviado en comisión de servicio al Kursk, donde en total ha navegado cuatro semanas. Esta última vez también le dijeron que tenía que embarcar. "Pero hacía tiempo que me correspondían vacaciones, y si no las tomaba ahora, ya no las tomaría nunca", añade.
"Me queda sólo medio año en la Marina", explicó Bressel al diario Kommersant, que como muchos otros periódicos publica historias de marinos a los que el destino atrapó en el Kursk y de afortunados que se quedaron en tierra.
"Cuando suena la señal de alarma, toda la dotación debe ir en cuestión de segundos a sus sectores y hermetizarse. Tienen que tenderse en el suelo y esperar las órdenes del comandante. Cualquier ejercicio físico es un gasto adicional de oxígeno", dice Bressel. Pero lo más probable es que los mandos del Kursk perecieran en los primeros minutos tras el siniestro. No había quien diera órdenes. Bressel teme que sus compañeros hayan sufrido también por la carencia de víveres. "En general, en cada sector debe haber reservas de alimentos y agua para el caso de una avería. Pero en este tipo de misiones cortas, por regla general no se distribuyen reservas de víveres en los diferentes sectores. ¿Por qué? Porque después el comandante debe rendir cuentas de cada lata de conserva...". Las reservas principales se hallan en el sector de la cocina, que, en opinión de los especialistas, se inundó en minutos.
Los marinos tienen limitados sus movimientos por el submarino. "Sólo pueden comunicarse por medio de golpes contra las paredes. Pasar de un sector a otro significa poner en peligro al sector contiguo. Ningún marino lo hará", asegura. Esto quiere decir, que como se temía, en los primeros instantes del accidente perecieron unos dos tercios de la dotación. Aún así, Bressel tiene esperanza. "Si no murieron entonces, resististirán. ¡Los muchachos tienen tanta fuerza interior! Tienen que aguantar, aunque el submarino se enfrió ya el primer día y allí hace mucho frío".
Nikolái Fiódorov sabía que algo pasaba con el Kursk, del que fue vicecomandante: las agujas del reloj que recibió en 1994, el día en que el submarino fue botado, se detuvieron el sábado, cuando ocurrió el accidente, pero su mecanismo interno siguió funcionando. Si la detención de las agujas fue premonitoria, Fiódorov, comandante del Vorónezh, gemelo del Kursk, confía en que el funcionamiento del mecanismo signifique que hay vida en el sumergible hundido.
El pasado martes, el día después de que se anunciase el accidente, los padres de Nikolái Pávlov, marino del Vorónezh, recibieron una carta: "Hola, queridos papaíto, mamaíta y hermanita Tániuska. Mi salud es normal. No os inquietéis por mí. Lo principal es que os cuidéis y no enferméis. Ya estoy hasta las narices del servicio. Estoy harto del Norte. No saldremos a la mar en agosto, nos han puesto en la reserva. Zarparemos el 1 o el 2 de septiembre a cumplir la tarea otoñal-primaveral. Después de Año Nuevo, toda la tripulación irá a estudiar a Obninsk. Y después zarparemos en una larga misión...". Al otro día, se informó a los Pávlov de que, en vísperas de las maniobras navales, su hijo fue trasladado del Vorónezh al Kursk.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
Kylian Mbappé no puede librar ni contra el Talavera: “Ha sido decisivo, por eso lo dejamos en el campo”
El Baskonia sigue fuerte en el Buesa y suma una victoria de prestigio ante AS Monaco
Muere Hans van Manen, coreógrafo y maestro de la danza contemporánea, a los 93 años
Petro reconoce por primera vez que Maduro es un “dictador”
Lo más visto
- La población de pumas de la Patagonia se dispara gracias a una presa inesperada: los pingüinos
- El Supremo ordena al ex fiscal general el pago de la multa y la indemnización a la pareja de Ayuso que le impuso al condenarle
- El Gobierno de Mazón pagó 107 millones de euros más a Ribera Salud al aumentar su aportación por ciudadano
- Elon Musk, más cerca de ser el primer hombre en alcanzar una fortuna de un billón de dólares
- Víctor Manuel, músico: “El capital tiene que rectificar, nunca pensé que fueran a ser tan voraces”




























































