"La educación debe servir para integrar a los inmigrantes"

ANA TORREGROSA Nació en Vélez-Blanco (Almería) y vuelve al terruño siempre que tiene ocasión. Es algo a lo que nunca renunció mientras ejerció en la Universidad de Granada y a lo que no renuncia tampoco ahora, recién estrenado su cargo como consejera de Educación y Ciencia. Las políticas de solidaridad y la calidad de la enseñanza son las prioridades de Cándida Martínez.Pregunta. ¿Cómo se plantea el inicio del nuevo curso escolar?

Respuesta. En los meses que llevo en la Consejería de Educación hemos trabajado en la preparación del nuevo curso y, más que problemas, lo que nos planteamos son iniciativas. Por ejemplo, en el tema de infraestructuras, a principios de curso se inaugurarán en Andalucía 32 centros, y otros 34 entrarán en funcionamiento a lo largo del año lectivo, además de los 60 que se han remodelado. Ampliaremos los equipos de orientación educativa, la atención en los centros para niños con necesidades especiales y trabajaremos para cumplir los que ahora son nuestros objetivos fundamentales: la equidad y la justicia para con el alumnado y el incremento de la calidad de la enseñanza.

P. El pasado curso la situación de los profesores interinos fue uno de los caballos de batalla. ¿Qué solución le ve?

R. Llegamos a un acuerdo firmado por todos los sindicatos que creo que es de los mejores de España. Los que llevaran más de un año trabajando cuando se firmó el acuerdo tendrán una estabilidad de tres años. Dentro de esos tres años tendremos que ver, a través del diálogo con todos, cuál es la solución definitiva. Según la legislación vigente el profesorado estable tiene que superar unas oposiciones. Eso es evidente. Pero se pueden plantear alternativas para buscar una solución definitiva para los interinos.

P. ¿Qué alternativas?

R. En el Estatuto de la Función Pública Docente, siempre dentro del marco legal, puede haber una transitoria especial para los interinos. Eso es algo que ya le exigimos al Ministerio de Educación. El PSOE también quiere presentar en el Parlamento una proposición no de ley para pedirle al Ministerio que convoque oposiciones en las que se reconozca de modo especial la experiencia docente. En estos momentos hay en Andalucía unos 17.000 interinos. Se trataría de convocar unas oposiciones especiales durante tres años seguidos.

P. Otro de los problemas recurrentes todos los años es el que afecta a la ratio de los centros privados-concertados.

R. Llevamos muchos años intentando que la ratio baje, porque así lo exige la ley y porque eso significa una mejor calidad en la educación. La ratio es de 25 alumnos por aula. Y en el caso de los centros privados-concertados nos hemos reunido con los padres y con responsables de los centros y les hemos explicado que nuestra postura no es un capricho. Los criterios están claros y son los que vamos a seguir.

P. ¿Conoce la Consejería de Educación la desmotivación que el profesorado?

R. Sí. Los profesores lo manifiestan a través de los sindicatos, e incluso con cartas que mandan y que yo les animo a seguir mandando, porque quiero saber lo que ellos piensan. Para mí el maestro es una figura entrañable que todos deberíamos reconocer. La incentivación pasa por apoyar los proyectos novedosos que presenten y por reconocer su trabajo.

P. ¿Hay que seguir potenciando la Formación Profesional o ya no es necesario?

R. Hay que seguir potenciándola. Aún hay sectores que consideran que es una enseñanza de segundo rango. Pero nosotros estamos convencidos de que es muy necesaria para Andalucía. Una prueba es que hemos creado una dirección general exclusivamente para la Formación Profesional. Además de lo que es la formación tradicional, incrementamos los ciclos formativos dirigidos a los sectores productivos andaluces más emergentes. El único problema es que a los alumnos de Formación Profesional que empiezan a hacer prácticas en empresas, los quieren contratar antes de que acaben. Existe una enorme demanda de buenos técnicos de grado medio y superior.

P. Poco después de llegar a la Consejería de Educación, anunció un Libro Blanco de la Universidad.

R. Estamos trabajando en eso. Queremos estudiar el mapa de titulaciones de las universidades andaluzas, su modo de financiación... Y eso queremos hacerlo contando con todos los sectores que están dentro de los Consejos Sociales de las Universidades. La idea es que la sociedad tenga su propia voz en el Parlamento andaluz y diga qué tipo de universidad quiere. La propuesta del Libro Blanco se empezará a debatir a principios de octubre.

P. ¿Y la investigación en las universidades?

R. Está a punto de iniciarse el III Plan de Investigación, con 160.000 millones de inversión. La idea es que las investigaciones puedan transferirse desde la universidad hasta las empresas y que eso redunde en una mejor calidad de vida de todos los andaluces. Al margen de lo que la Junta de Andalucía invierte con fondos propios en investigación, hay muchos grupos que son capaces de lograr fondos del Ministerio o de la Unión Europea.

P. ¿Qué actuaciones hay previstas para el alumnado inmigrante?

R. A principios de noviembre presentaremos un Plan para la Integración de Alumnos Inmigrantes que será pionero en España. Queremos ir hacia una escuela multicultural, porque ésa es nuestra realidad. Ahora tenemos unos 13.000 alumnos no universitarios extranjeros en Andalucía. No queremos que pierdan su lengua y su cultura. Queremos ofrecerles una posibilidad de integración desde la educación. Para eso aprovecharemos la experiencia de las aulas de adaptación lingüística de Almería y la de organizaciones que trabajan con inmigrantes.