_
_
_
_

Un hospital inglés extirpó sin permiso 146 cerebelos a niños muertos

También en Japón

El hospital Alder Hey de Liverpool, al oeste de Inglaterra, admitió ayer que almacena tejidos cerebrales que extirpó a niños sin el consentimiento de sus familiares. El centro, que ya fue criticado meses atrás por ocultar a los padres la extirpación de corazones a sus pequeños, desveló ayer que llevó a cabo más de un centenar de intervenciones que previamente no había dado a conocer.Una investigación interna desvela ahora el hallazgo de tejidos cerebrales de 146 menores de edad. Los tejidos se removieron durante la autopsia y se enviaron a la Universidad de Liverpool para diversos programas de investigación. Los padres no fueron informados ni, por tanto, otorgaron el permiso pertinente.

"El proceso de catalogación de los órganos infantiles ha concluido. Como resultado de este detallado ejercicio, se ha descubierto tejido cerebral que previamente no habíamos catalogado. Lamentamos esta situación", señala el hospital en un comunicado.

El tejido se extirpó del cerebelo, masa que ocupa aproximadamente el 10% del cerebro, como muestras para una investigación cuyos resultados no han salido a la luz. Un detalle poco trascendente para los familiares de los niños que no confian en haber llegado al fondo de la controversia.

Es la segunda vez en pocos meses que el hospital admite haber extraídos órganos de los cuerpos sin vida de cientos de menores sin solicitar el consentimiento paterno. "Alder Hey nos dice constantemente que tenemos toda la información y que nos están contando la verdad. Luego descubrimos que aún queda más por saber", denunció ayer el portavoz del grupo de padres, Ed Bradley. A ellos les queda el proceso más doloroso: asumir lo que ha pasado con sus pequeños.

Por otra parte, ayer se hizo público que el Instituto Nacional de Ciencias Neurológicas de Japón utilizó en sus investigaciones cerebros de niños muertos obtenidos sin el preceptivo permiso familiar. Los cadáveres de los niños, algunos de ellos fallecidos de forma repentina en sus casas, habían sido entregados para que se les realizara la autopsia al Centro de Exámenes Médicos de Tokio. Este centro los envió después al instituto neurológico, donde se les extrajo el cerebro.Entre 1994 y 1999, los neurólogos crearon un banco de cerebros que usaron en investigaciones sobre el síndrome de muerte súbita infantil. Un directivo del instituto declaró al periódico Ashahi que consideraba innecesario el permiso familiar, ya que la investigación era "una ampliación de la autopsia".

El rotativo afirma que la intención de los médicos era equipararse en investigaciones neurológicas a países como Estados Unidos, y añade que a petición del Gobierno 31 cerebros de niños han sido devueltos al Centro de Exámenes de Tokio.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_