Madrugar y huir por orden superior

Salir de España a toda velocidad. Fue la orden tajante que recibieron los nueve integrantes de la delegación de atletas cubanos que no pudieron volar a Italia el sábado porque los aviones estaban llenos. Javier Sotomayor, número uno en salto de altura, Iván Pedroso, campeón del mundo de salto de longitud, y 13 compañeros más viajaron unas horas antes de Guadalajara a Milán. Ninguno de ellos quiso hablarcon la prensa sobre la repentina decisión, pero tampoco disimularon su disgusto."España es el mejor país europeo para nosotros. Nos sentimos casi tan bien como en Cuba", había dicho el jueves Sotomayor a TVE. Acababa de llegar a Guadalajara, donde se entrena desde hace 14 años, y no pensaba moverse de esa ciudad hasta el 5 de septiembre, fecha prevista para su viaje a Sydney. El saltador se refirió a Niurka Montalvo como "una amiga", añadió que conocía las gestiones del Comité Olímpico Español para encontrar una solución al veto del Gobierno cubano y mostró su confianza en que el conflicto no afectase a la concentración en Guadalajara.

Pero se equivocó. Él mismo y 14 colegas tuvieron que salir disparados, y enojados, hacia Barajas tras el entrenamiento del sábado; la orden fue transmitida por el secretario de la Federación Cubana de Atletismo, desplazado expresamente a Madrid, pero es evidente que venía de más arriba. Sólo así puede entenderse la celeridad de ayer: el segundo grupo había previsto viajar a Milán a las 20.10, pero los despertadores sonaron muy temprano en el Hostal Galicia de Guadalajara: a las siete de la mañana ya no quedaban atletas cubanos en la ciudad.

El talante de los viajeros era muy similar al del sábado, según el español Juan José Díaz, quien trabaja como relaciones públicas de la Federación Cubana y fue galardonado con la condecoración de los Mártires de Barbados por los servicios prestados desde hace muchos años: "Todos se mostraban muy disgustados y apenados, tanto por el veto a Niurka como por su marcha repentina. Ellos entienden el argumento del Gobierno cubano, que subraya la gran inversión realizada en la formación deportiva de los atletas. Pero también consideran que España no tiene la culpa del conflicto. Les duele marcharse de una ciudad donde reciben un trato fraternal".

El Ayuntamiento de Guadalajara había organizado un homenaje popular a los atletas cubanos para el 4 de septiembre, según confirmó Antonio Román, concejal de Deportes. Antes se esperaba la llegada de más atletas, procedentes de otras concentraciones en Francia y Alemania.Todos se reunirán dentro de unos días en un lugar de Italia no precisado, a unos 300 kilómetros de Roma.

La decisión de las autoridades cubanas no afecta, por ahora, a la selección de balonmano, que llegó el sábado a Cantabria para jugar dos partidos de preparación con el equipo olímpico español; el primero se disputó ayer en Santander; el segundo está previsto para el miércoles en Gijón. Los jugadores cubanos no dijeron nada sustancial sobre el veto contra Montalvo. Tras el octavo puesto en el Mundial de Egipto (1999), donde mostraron un gran poderío físico y una considerable mejoría técnica, sus posibilidades de éxito en Sydney están lastradas por tres ausencias polémicas de jugadores importantes. Vladímir Rivero, Julio Fis y Reinaldo incumplieron el acuerdo contraído con la Federación cubana, que envió a casi toda la selección a jugar en las ligas de Hungría y Francia con la condición de que no se conviertieran en profesionales. Pero Fis fue contratado por el Bidasoa de Irún, y acaba de pasar al Ciudad Real; Reinaldo ha fichado por un equipo francés, y Rivero por el Dunaferr húngaro. Ninguno de los tres puede volver a Cuba ni jugar con la selección. Son tres casos más que se añaden a la extensa lista de deportistas cubanos que han optado por emigrar. Y todo indica que Niurka Montalvo, casada con un español, ha desbordado el vaso.