Las fuerzas de la ONU terminan su despliegue entre Israel y Líbano

Cinco nacionalidades

La Fuerza Interina de la ONU en Líbano (FINUL) completó ayer su despliegue en la frontera con Israel, cuando han pasado más de dos meses de la retirada del Ejército israelí del sur de ese país árabe después de 22 años de ocupación. Daljeet Bagga, oficial indio que ocupa el cargo de portavoz de la FINUL, afirmó que el "despliegue terminó" a lo largo de 82 kilómetros gracias a la ausencia de incidentes, a los contactos con las autoridades libanesas que precedieron a la operación militar y a la ayuda de la gendarmería de Líbano. La ONU advirtió anteriormente de que el despliegue podría haber terminado hoy, pero pudo completarse antes y en unas horas.Tan sólo ocurrió un pequeño percance en la zona de Mari, en el sector oriental del territorio liberado por Israel: un incendio arrasó un olivar y provocó la explosión de 22 minas sin causar ninguna víctima.

La milicia shií libanesa de Hezbolá (Partiado de Dios), principal fuerza opositora a la ocupación israelí, no se ha manifestado durante el despliegue, aunque instaló "puestos de observación" para vigilar la zona.

En total, casi 400 cascos azules, en grupos de 30 hombres al mando de un oficial, se desplegaron en 13 nuevas posiciones, que se agregan a las seis establecidas el fin de semana pasado. Las posiciones se ubican en las poblaciones fronterizas o en las colinas de los alrededores. Al mismo tiempo, soldados de la ONU reforzaron sus antiguos puestos en la zona meridional de Líbano.

Los soldados pertenecen a los batallones de Irlanda, Fiji, Ghana, India y Nepal, disponen de vehículos militares y se han instalado en barracones prefabricados o en tiendas de campaña. En la localidad de Alma al Chaab, los soldados de Fiji requisaron la casa de un antiguo oficial del Ejército de Líbano Sur (una milicia pro-israelí ya disuelta), que huyó a Israel junto con unos 6.000 libaneses, cuando el pasado 21 de mayo el Ejército hebreo abandonó las tierras ocupadas.El despliegue de los cascos azules en la frontera se realizó con el visto bueno del presidente libanés, Émile Lahud, cuyo Gobierno condicionó la llegada de la FINUL a las áreas evacuadas al fin de las violaciones israelíes de la llamada línea azul. Dicha línea fue trazada por Naciones Unidas para certificar la completa retirada israelí del sur libanés.

"Es un momento histórico para la FINUL, que por fin podrá, después de 22 años, aplicar la resolución 425 adoptada por el Consejo de Seguridad de la ONU en marzo de 1978", señala un comunidado de la fuerza militar de Naciones Unidas.

Según la FINUL, un contingente de unos mil hombres, entre policías y militares libaneses, reforzará las posiciones fronterizas. El Gobierno de Líbano ha informado de que esta fuerza mixta estará dispuesta esta noche, pero no indicó cuándo ocupará posiciones.