El vertido de fuel de una central térmica contamina 10 kilómetros del Tajo en Toledo

El río Tajo sufrió ayer un gran vertido de fuel procedente de la central térmica de Aceca, en Villaseca de la Sagra (Toledo). El escape, cifrado en 100.000 litros por el alcalde de la citada localidad, contaminó 10 kilómetros de cauce y anoche amenazaba con alcanzar Toledo capital. Aunque la fuga, de origen accidental, se inició a las once de la mañana, la población no fue informada hasta que Protección Civil alertó de que no utilizase el agua contaminada. El Ministerio de Medio Ambiente ha abierto un expediente a la central, propiedad de Unión Fenosa e Iberdrola.

La mancha tenía una extensión de un kilómetro de longitud y un centímetro de espesor en las proximidades de la presa de Higares, un pequeño azud situado a unos diez kilómetros aguas abajo de la central térmica, según aseguró el alcalde de Villaseca de la Sagra, Jesús Hijosa, del PP. La fuga, a juicio de Hijosa, se produjo al fallar dos válvulas de seguridad de un tanque de combustible con una capacidad de 150.000 litros del que se abastece la central térmica. Ni el Ministerio de Medio Ambiente ni la Delegación del Gobierno en Castilla-La Mancha ni los propietarios de la central han facilitado explicación alguna sobre las causas del fallo y el alcance del accidente.

A medianoche grupos de técnicos habían colocado planchas de corcho en las juntas de las compuertas de la presa de Higares, unos 10 kilómetros aguas abajo de la central térmica, para asegurarse de que no se produzcan filtraciones, contener el vertido y evitar que llegara a Toledo.

A esa hora todavía no habían llegado a la zona los especialistas de la empresa valenciana Europea de Productos Especiales, especializada en la contención de este tipo de vertidos, que fue reclamada por responsables de la Confederación Hidrográfica del Tajo. A las 00.45 horas de hoy aún no habían llegado los camiones con las bombas de achique procedentes de Valencia a la presa de Higares.

Comité de crisis

Hijosa explicó que se habían derramado "unos 100.000 litros de fuel al río Tajo". El fuel no llegó a mezclarse con el agua del río por su mayor densidad y flotaba en una capa por la superficie del cauce. "La película no se mezclan porque la corriente no tiene fuerza". El regidor de Villaseca estaba convencido de que el vertido no llegaría a la capital toledana, informa L. F. Durán.El suceso movilizó a los responsables del Ministerio de Medio Ambiente, la Confederación del Tajo y la Delegación del Gobierno. Su alcance es de tal gravedad que se ha creado un comité de crisis en la propia central térmica compuesto por más de 100 personas. Ninguna de ellas efectuó anoche declaraciones. Un guarda impedía pasar las llamadas de teléfono a la sala de reuniones para contactar con técnicos.

Operarios de la empresa CLH -suministradora del fuel a la central térmica- vertían anoche productos químicos para intentar solidificar el combustible y así poder sacarlo del río con más facilidad, según el alcalde de Villaseca. Su colega socialista del municipio contiguo de Mocejón, la médico Guadalupe Martín, aseguró que recibió un aviso a las seis de la tarde desde el Centro Regional de Urgencias Medioambientales para que alertara a los agricultores de la localidad del riesgo de regar sus fincas con agua del Tajo. Martín afirmó que el vertido no afectaba al abastecimiento de la localidad porque éste recibe el agua del embalse de Picadas (río Alberche). "Lamento muchísimo que se haya tardado tanto en dar el aviso. De ser así me parece asumir un riesgo desmesurado", dijo Martín.

El Ministerio de Medio Ambiente ha abierto un expediente a los responsables de la central térmica, que explotan conjuntamente las empresas Iberdrola y Unión Fenosa. No se descarta una sanción por el accidente medioambiental.El cauce del Tajo por este tramo es muy débil y sus aguas están muy deterioradas por las vertidos residuales que transporta. Aguas arriba, a su paso por Aranjuez, su caudal no supera los seis metros cúbicos por segundo, una cantidad que se considera mínima para soportar los ecosistemas del río. Pasado Aranjuez el cauce disminuye aún mas debido a las derivaciones para riegos de la zona.

La central de Aceca entró en servicio en 1969 y produjo el año pasado 468,85 GWh de electricidad. Sus propietarios tienen previsto instalar dos nuevos grupos de generación, que esperan que entren en funcionamiento en el 2003. En la actualidad, tienen dos grupos de 314 megavatios de potencia cada uno y se alimenta con fuel y gas natural.