Execrable violencia

Ante la confusión ciudadana (...) es necesario que se proceda a aclarar las causas, a través de una investigación imparcial que lleve a castigar a los responsables. Ante todo, hay que condenar los desmanes y excesos de violencia, que causaron seis muertos, centenares de heridos e incendios en la propiedad pública y privada.En cuanto a los organizadores de la Marcha de los Cuatro Suyos, han sido enfáticos al sostener la legitimidad de su protesta, así como el carácter pacífico de la misma. (...) Si bien deben asumir la responsabilidad que les corresponde, (...) sería maniqueamente excesivo calificarlos como promotores directos de la violencia, mucho más si aún no se ha investigado lo que pasó.

Acometer estas pesquisas es urgente y necesario. Pudiera ser que, dentro del anonimato y la exaltación propios de la multitud, algunos participantes pudieran haberse desbocado en su indignación. Ello sería una consecuencia explicable, aunque no justificable, de la polarización política a que ha llevado la obstinación de la cúpula por permanecer en el poder, a través de una irregular elección que ha puesto al país bajo atenta observación internacional.

Sin embargo, (...) hay otros factores que deben analizarse, por ejemplo, la notoria infiltración de delincuentes, elementos extremistas de algunos partidos obsoletos y, como se ha denunciado, hasta personal de los servicios de inteligencia.

(...) Lanzar acusaciones a priori y sin fundamentos es peligroso y sólo acrecienta la tensión política y la polarización. (...)

Lima, 30 de julio