Dos convenios aseguran la conservación de los frescos góticos de Cardona
Dos convenios del Ayuntamiento de Cardona con la Generalitat y con la Fundación Fuster-Guals Vila Medieval de Cardona garantizarán la conservación y restauración de las pinturas del siglo XIII del palacio Graells, uno de los escasos ejemplos que han perdurado del gótico civil catalán, que se prevé que queden incluidas en el Catálogo del Patrimonio Cultural Catalán. El edificio pasará a ser propiedad del Ayuntamiento para que éste lo destine, una vez rehabilitado, a fines culturales
El pleno del Ayuntamiento de Cardona, con una amplia mayoría de CiU apoyada por un grupo de independientes, aprobará hoy los dos acuerdos. La fundación Fuster-Guals Vila Medieval de Cardona, del eminente cardiólogo Valentí Fuster, comprará los dos edificios del palacio Graells (conocido también como palacio de los Aguilar) por un valor de 10 millones de pesetas y los cederá al municipio de Cardona con la contrapartida de que una de las plantas se destine, una vez rehabilitada, a sede de la fundación o, si ésta lo desea, a fines culturales. El Ayuntamiento también firmará un segundo convenio con el Departamento de Cultura de la Generalitat por el cual el Gobierno catalán se compromete a la recuperación y el mantenimiento de las pinturas, que se conservarán en el mismo palcio Graells, y a la redacción de los proyectos de rehabilitación de los edificios.También existe el compromiso de la Generalitat de subvencionar la intervención que se deberá realizar en un edificio que se encuentra en avanzado estado de deterioro. Y una tercera parte del acuerdo se firmará en el mes de septiembre con el propietario actual del inmueble, Josep Sanjuan, quien venderá el edificio y cederá las pinturas. Esta actuación está pendiente de la valoración económica de las pinturas.
El palacio Graells es un edificio gótico de entre los siglos XIII y XIV situado en el núcleo antiguo de Cardona. Es de planta rectangular, bastante alargada y de poca anchura, con una planta baja, una planta noble y una galería en la parte superior. Las pinturas se descubrieron en el verano de 1999 y representan un jinete y tres caballos al lado de unos amplios cortinajes que cubren toda la pared.
