"La oferta turística vive un crecimiento sin orden que es preocupante"

El presidente de los hoteleros de la Costa del Sol desde hace siete años, y desde hace dos de la patronal andaluza del sector, Miguel Sánchez, alerta sobre los riesgos del nuevo 'boom' inmobiliario y reclama inversiones para otros segmentos como la industria del ocio, que, además de ser muy rentables, ayudarían a consolidar una oferta completa y de calidad

No no hay satisfacción completa para Sánchez. Reconoce la excelente marcha del sector turístico, los esfuerzos realizados para disponer en la actualidad de una "magnífica oferta", pero recuerda que el turismo vacacional es "muy sensible" y que en cualquier momento puede producirse un estancamiento.Pregunta. ¿Qué valoración hace del transcurso de la temporada hasta el momento?

Respuesta. La situación está más o menos según lo previsto. Pensábamos que el año iba a ser mejor que 1999, pero no está siendo así. Hay un ambiente extraordinario y han venido más viajeros, pero en ocupación hotelera vamos por debajo debido a la expansión del turismo residencial. En julio, vamos a tener entre un 80% y un 85% de ocupación, pero para la tercera semana de agosto hay camas libres.

P. A los hoteleros no les gusta el turismo residencial.

R. Nos preocupa el crecimiento y la expansión tan brutal que está teniendo. Sabemos que es importantísimo para el desarrollo, pero no sé si a largo plazo nos pasará factura. Se han hecho inversiones muy altas en reformar los hoteles y esto nos puede perjudicar a largo plazo.

P. Pero esas expectativas favorables también han permitido que haya importantes inversiones en nueva planta hotelera.

R. Los hoteles llevamos tres años de reformas continuas y se han hecho inversiones muy importantes. Las perspectivas eran y son excelentes, la costa se está consolidando como una de las zonas más completas para el desarrollo vacacional en todo el Mediterráneo. Tenemos que hacer las cosas con sentido común, también en el crecimiento de plazas hoteleras. Muchos municipios piden más hoteles y es lógico que los alcaldes los quieran, porque es riqueza para sus pueblos e impuestos y licencias que se cobran, pero hay que crecer conforme el mercado lo pida y no debemos dejarnos llevar por los impulsos de unos años buenos. El turismo vacacional es muy sensible y en cualquier momento puede estacionarse, no es como el turismo de París o Nueva York.

P. ¿Comparten el objetivo de la Administración de que en el futuro haya menos turistas y más calidad?

R. Por supuesto. Apostamos por la calidad y no por la cantidad. Las pernoctaciones no han crecido. No quiero que lo que digo parezca preocupante, pero los hoteleros vemos que se está invirtiendo mucho en promociones inmobiliarias y hoteles y nos gustaría que estas inversiones se repartieran en otros sectores de los que carecemos y que son tremendamente importantes. Hay un campo amplísimo en el que está todo por hacer como el ocio, que puede ser tan rentable o más que un hotel. Carecemos de proyectos que amplíen la oferta.

P. ¿Cree que actualmente hay un riesgo de saturación en zonas como la Costa del Sol que haría aconsejables algunas medidas restrictivas?

R. Nos preocupa el crecimiento sin orden al que asistimos, que no se crezca conforme el mercado lo pida. Nuestra costa no es Baleares, hay puntos aún por desarrollar, pero tenemos que estar muy pendientes y evitar la masificación. Las infraestructuras que se necesitan deben ir paralelas al desarrollo urbanístico, no todo debe consistir en meter el mayor número de gente posible, por ejemplo hay un verdadero caos de aparcamientos. No se puede sólo crecer y crecer, y venga a hacer casas y apartamentos. La gente necesita centros de salud, seguridad, servicios, carreteras, aparcamientos. Tenemos que exigir soluciones a las administraciones y que las infraestructruras necesarias vayan por delante del desarrollo urbanístico. Calculamos que en la Costa del Sol tenemos en estas fechas una población flotante de cerca de 800.000 personas, que además cambian cada ocho o 10 días. Si la gente encuentra incomodidades, nos restará calidad.

P. Volvemos a la reivindicación de la red de saneamiento integral.

R. Eso es un cáncer. Lo venimos reclamando todos de forma unánime desde hace un montón de años y nos saca de quicio que la Administración no lo vea. Nuestra principal oferta es sol y playa y no se analiza el daño que hace que no tengamos el ciclo del agua resuelto. Cuando la Expo 92 se nos dijo que había prioridad en las carreteras, y que después se haría el saneamiento. En 1993 y 1994 nos hablaban de que costaría entre 18.000 y 20.000 millones. Hoy cada uno dice una cifra y cada vez es más complicado, porque al tener que intervenir las tres administraciones puede haber un vacío.

P. ¿No es también un riesgo que los hoteles andaluces sean de los que más se han encarecido en el último año, con una subida media del 10%?

R. No podemos meter a todos en el mismo cesto. Los precios de las zonas turísticas han crecido alrededor del IPC, aunque hay hoteles que han realizado mejoras y han ajustado sus precios a la nueva calidad que ofrecen. Tenemos una competencia cada vez más fuerte, salimos en el mismo folleto del turoperador con otros destinos y a la hora de decidir entre una zona y otra el cliente opta por el sitio que más le interese.

P. ¿Cómo puede afectar al mercado andaluz las fusiones entre turoperadores europeos?

R. Nos preocupa que se restrinja la competencia, que haya una situación en la que un turoperador cambie sus planes sobre una zona y altere el 25% del negocio europeo, pero tenemos que adaptarnos y aprovechar las posibilidades de promoción que dan las nuevas tecnologías.

P. ¿Cree que la promoción y reservas a través de Internet harán que el cliente planifique sus viajes y se reduzca la dependencia de los turoperadores?

R. Con el mercado electrónico va a haber un porcentaje más alto de turistas que no acudirán a las agencias, pero también los turoperadores tendrán sus portales en Internet. Quizá a las agencias minoristas les afectará más. Tendremos mayor porcentaje de clientes directos, pero los turoperadores seguirán controlando los paquetes porque ofrecen otros servicios, como los chárter.

P. Desde la patronal han sido muy radicales en su oposición a la ecotasa.

R. Nosotros somos los más interesados en la mejora del medio ambiente, pero no puede ser a través de una ecotasa. Creo que habría que buscar financiación privada para algunos proyectos necesarios, pero no poniendo un impuesto a los turistas.

P. ¿Qué medidas reclaman los hoteleros?

R. Que se persigan las camas no regladas. Hay un mercado sumergido cada vez más amplio que nos hace una competencia tremenda y daña la imagen del producto.