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Reportaje:

Los Reyes llegan a una Bolivia en crisis

Jorge Marirrodriga

El reforzamiento de las instituciones democráticas de Bolivia -el país del mundo con más golpes de Estado en este siglo, unos 200- es el principal objetivo de la visita oficial que los Reyes de España iniciarán a las once de la noche de hoy, sábado, hora española, al país andino. Tras finalizar en Manaos su visita a Brasil, donde don Juan Carlos expresó su satisfacción por haber conocido de cerca los problemas de la Amazonia, en Bolivia no tendrán que recorrer muchos metros para observar de primera mano los conflictos económicos y sociales del país. Estudiantes y profesores que reclaman la creación de una Universidad Autónoma en El Alto, localidad de 600.000 habitantes contigua a La Paz han anunciado que se "cruficarán" a lo largo del camino de la comitiva a pesar de los llamamientos del Gobierno de Hugo Bánzer y del obispo de El Alto, el español Jesús Juárez, para que no perjudiquen la imagen de Bolivia. Desde hace una semana, las manifestaciones y los disturbios son casi diarios. En El Alto, sólo un 10% de la población tiene agua corriente y alcantarillado.Pendiente de la ayuda internacional para salir de la crisis, el Gobierno boliviano busca nuevas inyecciones de capital extranjero que le permitan cubrir las necesidades básicas de una población que sufre carencias extremas. A mediados de esta semana un conocido local de ocio de La Paz quedó reducido a cenizas porque los bomberos no disponían de agua para sofocarlo. Sólo 72 horas antes de que los Reyes aterricen en Bolivia, el Gobierno ha emitido un Decreto Supremo que declara en Cochabamba, una de las ciudades más importantes del país, el estado de emergencia económica. En la zona se producen graves problemas por la escasez de agua y entre las medidas más perentorias que hay que tomar figuran el asfaltado de carreteras y la construcción de puentes, sin los cuales la llegada de bienes de consumo a la zona se complica considerablemente. La prensa local asegura que la ineficacia y la presión de los organismos financieros internacionales pesan como una losa sobre el Fondo Nacional de Desarrollo Regional, del que piden la dimisión. Por último, el Ejército ha movilizado efectivos en zonas indígenas ante el temor de que se produzca un movimiento insurgente.

En el plano político, don Juan Carlos celebrará reuniones con el presidente de la República, Hugo Bánzer, quien tras un golpe de Estado ha encabezado el Gobierno militar más largo de este siglo (1971-1978), y obtuvo la victoria en las urnas en 1997 como candidato de la Acción Democrática Nacionalista (ADN). El monarca español se dirigirá al Congreso y el Senado bolivianos reunidos en sesión conjunta el próximo lunes y mantendrá una reunión con la Corte Suprema de Justicia (Tribunal Supremo) el próximo martes.

La oposición boliviana también tendrá un hueco en la agenda real, con un encuentro con dirigentes del Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR), cuyo dirigente, el ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada es autor de un sistema de pensiones que consiste en colocar en el paraíso fiscal de Bahamas 1.600 millones de dólares procedentes de privatizaciones de empresas telecomunicación, energéticas, minas o casinos. Los intereses de esta inversión sirven para pagar a 600.000 pensionistas bolivianos 200 dólares al año. El capital está invertido de manera que ningún Gobierno boliviano pueda retirarlo y dedicarlo a otros fines.

Los intereses económicos de España se centran principalmente en el sector bancario. El BBVA monopoliza de hecho el sistema de previsión social, algo que despierta recelo en sectores políticos. Por su parte, el BSCH controla la mayoría accionarial del Banco Santa Cruz, el más importante de país. El BBVA también participa en un importante proyecto energético, el gaseoducto boliviano hacia Brasil. A diferencia de otros países de la zona, las empresas españolas de telecomunicaciones han sido superadas por otras europeas, en este caso la italiana Entel, quien por 600 millones de dólares se hizo con el mercado interno. Además, celebrarán una recepción con las colectividades españolas presentes en Bolivia.

Se da la circunstancia de que la estancia de los Reyes en Bolivia coincidirá mañana domingo con la celebración del 175 aniversario de la independencia boliviana, precisamente de la Corona española.

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Sobre la firma

Jorge Marirrodriga
Doctor en Comunicación por la Universidad San Pablo CEU y licenciado en Periodismo por la Universidad de Navarra. Tras ejercer en Italia y Bélgica en 1996 se incorporó a EL PAÍS. Ha sido enviado especial a Kosovo, Gaza, Irak y Afganistán. Entre 2004 y 2008 fue corresponsal en Buenos Aires. Desde 2014 es editorialista especializado internacional.

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