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Afectados por las lluvias en Sant Vicenç acusan a la Administración de no hacer nada para reparar los daños

Los vecinos de dos barrios de Sant Vicenç de Castellet (Bages) afectados por las inundaciones del 10 de junio se han mostrado críticos con las administraciones que han intervenido en la reparación de los daños ocasionados. Cloacas que aún están obturadas, la riera de Castellet -que fue el torrente que les inundó las viviendas- sin limpiar, pasos de agua colapsados y un subterráneo impracticable para cruzar la C-1411 han crispado los vecinos. El martes, 150 vecinos de los barrios de la Farinera -donde el 10 de junio murió una mujer de 83 años al quedar atrapada por las aguas en su dominicilio- y de Can Xesc expresaron su malestar al equipo de gobierno municipal y le expusieron el catálogo de quejas. Las críticas se centraron en la falta de prevención para evitar que el agua inundara el barrio, pero también en la ausencia de soluciones para paliar los daños. Se solucionó el problema más inmediato tras la inundación y se organizaron canales de ayuda solidaria, pero aún hay familias que no han recuperado sus viviendas y que no han recibido ayuda para poderlo hacer.

Vecinos de la Farinera expusieron al alcalde, el socialista Joan Montsech (PSC): "Prácticamente no hemos visto máquinas limpiando el barrio y el mal olor de las cloacas es tan fuerte que casi no podemos ni salir ni abrir las ventanas". Los habitantes de Can Xesc se lamentaron de haber pasado dos días sin ningún camino de acceso y exigieron que se canalice y se modifique el trazado de la riera de Castellet. No sólo se centraron en las críticas a la ayuda municipal, sino que también hicieron hincapié en la necesidad de que se haga presión ante otras administraciones para recibir más ayudas.

Joan Montsech comprende "el malestar vecinal y el nerviosismo". "La gente ha pasado un trauma y ve que las ayudas de que tanto se ha hablado no llegan o no tienen aceso a ellas", afirma el alcalde, quien se ha quejado de las líneas de ayuda que ha abierto la Generalitat: "Creí que serían de verdad, pero lo que ahora ha salido son unas ayudas de beneficencia, a las que sólo tendrán acceso unos pocos, y los préstamos para los industriales, y esto no soluciona los problemas de los afectados". Gráficamente, Montsech explicó: "Las pocas ayudas que hay se dan por las paredes, y lo que más ha perdido la gente es lo que tenía dentro de las paredes".

El alcalde de Sant Vicenç asegura que la Administración local ha hecho todo lo que podía, dada la capacidad del Ayuntamiento.

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