Los testigos exculpan al hijo del matrimonio de Sentmenat

Todos los testigos que declararon ayer ante la juez del Juzgado número 8 de Sabadell ratificaron la versión del hijo mayor del matrimonio Berenguer Casagolda. Josep Berenguer Casagolda, que ayer volvió al trabajo después de salir en libertad provisional bajo fianza de tres millones de pesetas, fue detenido por la policía el viernes de la semana pasada policía acusado de urdir el asesinato de sus padres.La policía lo detuvo después de que el sobrino del matrimonio, Miguel J. Berenguer, lo señalara como el cerebro del asesinato. Según la declaración de Miguel J. Berenguer, que ingresó en prisión el domingo acusado de secuestro, robo y asesinato, su primo fue quien planeó el asesinato por temor a que sus padres lo desheredasen.

No obstante, su versión ha quedado en entredicho tras declarar todos los testigos que ayer pasaron por los juzgados de Sabadell. Estas personas afirmaron que no existía herencia alguna porque el patrimonio ya había sido distribuido entre los tres hijos del matrimonio asesinado y ratificaron que Miguel J. Berenguer sentía "animadversión" hacia la familia Berenguer Casagolda. Su tío le había pagado en varias ocasiones la fianza para que pudiera eludir la prisión, le había dado trabajo y le había ofrecido un lugar donde vivir, hasta que un día se cansó de ayudarle.

Ningún indicio

Según el abogado de Josep Berenguer, Juan Miguel Domínguez, al margen de las acusaciones del sobrino, que tiene antecedentes penales y es confidente de la policía, no hay ningún indicio de que Berenguer estuviera vinculado con el crimen que acabó con la vida de sus padres. Y el relato de Miguel J. Berenguer no se lo cree nadie, ni siquiera sus hermanas.

Miguel J. Berenguer se entregó el pasado jueves, cuando la policía ya le pisaba los talones, y contó su versión de los hechos. Implicó a su primo y dijo que éste le había prometido una considerable cantidad de dinero, que encontraría en algún cajón de la casa, por matar a Miquel Berenguer, de 68 años, y Emília Casagolda, de 71.

Miguel J. Berenguer acudió al domicilio de sus tíos junto con tres sicarios y no encontró nada. Al matrimonio lo torturaron y después lo asesinaron. La familia, muy molesta por todo lo que se ha publicado en la prensa, ha presentado una denuncia ante la juez que lleva el caso por todas las filtraciones que se han producido pese al secreto del sumario.

Todo parece indicar que la semana que viene la juez habrá tomado alguna decisión y la familia Berenguer, "atemorizada" desde hace tiempo por Miguel J. Berenguer, que ya les había amenazado en anteriores ocasiones, al fin podrá poner punto final a esta pesadilla. Josep Berenguer, pese a todo lo que está pasando, está bastante tranquilo porque las acusaciones contra él carecen de fundamento.