Los líderes de la oposición piden a Pujol que no tarde otros 13 años en convocarles

Jordi Pujol ha tardado 13 años para volver a reunir a los líderes parlamentarios catalanes. Ayer lo hizo, en un almuerzo en la Casa dels Canonges, con la ausencia notable del socialista Pasqual Maragall, para explicarles una campaña institucional de la Generalitat a fin de mejorar la imagen de Cataluña en el resto de España. La oposición y el Partido Popular pidieron al presidente, con más o menos énfasis, que se prodigue más en este tipo de encuentros.

La última ocasión en que el presidente de la Generalitat convocó a todos los presidentes de los grupos parlamentarios fue en 1987, a raíz del atentado de ETA en Hipercor que costó la vida a 21 personas. Ayer, Pujol almorzó con todos ellos -Maragall excusó su asistencia por problemas de agenda y delegó su representación en Joaquim Nadal- para exponerles un programa de carácter institucional con el objetivo de mejorar la imagen de Cataluña en el exterior. La campaña, que Pujol presentará hoy públicamente, se iniciará el 3 de mayo del próximo año en Madrid con una exposición sobre Cataluña.La ausencia de Pasqual Maragall provocó cierto malestar en la Generalitat y aunque el consejero de Presidencia, Joaquim Triadú intentó minimizar el gesto y evitar segundas lecturas, fuentes del Gobierno catalán expresaron su recelo. "No nos preocupa, ya estamos acostumbrados", señalaron. Por su parte, Jordi Pujol, en tono irónico, comentó: "Él sabrá qué cosa tenía muy importante para no poder asistir".

En el almuerzo y posteriormente en conferencia de prensa, los representantes de la oposición y del Partido Popular emplazaron al presidente a convocar más reuniones para discutir y acordar otros asuntos de carácter político. Asistentes al almuerzo comentaron a este periódico que cuando le expusieron esta demanda a Pujol, éste se mantuvo en silencio y obvió convocarles para otra ocasión.

El presidente de Iniciativa per Catalunya-Verds, Rafael Ribó, se interrogó incluso por el motivo de tal entrevista. En su comparecencia ante los medios de comunicación, Triadú respondió a la pregunta. "No queremos ofrecer con este programa la imagen que el Gobierno de la Generalitat tiene de Cataluña, sino la realidad de todo el mundo, y por eso hemos creído oportuno invitar a todos los grupos parlamentarios", afirmó. Al ser preguntado sobre la continuidad de este tipo de entrevistas, el consejero afirmó que el Gobierno siempre ha mantenido un diálogo fluido con todos los grupos. Algunos de los asistentes al almuerzo calificaron la reunión de "cordial", pero censuraron que la charla se limitara a la campaña y no se discutieran otros asuntos de la actualidad política y social.