Los cocainómanos que piden ayuda para desengancharse aumentan un 33% en un año

Los cocainómanos empiezan a pedir ayuda. En 1998, último año del cual hay datos disponibles, 6.012 españoles recibieron tratamiento para dejar esta droga, lo que supuso un aumento del 32,7% con respecto al año anterior, según un informe del Observatorio Español sobre la Droga presentado ayer en la jornada inaugural de los cursos de verano de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo de Santander (UIMP). El responsable del Plan Nacional, Gonzalo Robles, culpó del éxito de la cocaína entre los jóvenes al "exceso de tolerancia" social.

El aumento es significativo tanto entre los cocainómanos nuevos para el sistema de atención como entre los que llegan por segunda o más veces. Los primeros han pasado de 681 en 1991 a 4.174 en 1998, mientras que los repetidores fueron 262 en 1991 y 1.838 hace dos años. Hace cuatro años, el porcentaje de cocainómanos tan sólo suponía el 9% de los toxicómanos en tratamiento. En 1998 se habían duplicado, hasta llegar al 21,4%.Esto no implica que el número de consumidores de cocaína haya aumentado, sino más bien que éstos empiezan a darse cuenta ahora de que esta droga, cuyo uso se reduce en ocasiones reducido al fin de semana, repercute en su vida diaria, según interpretan en el Plan Nacional sobre Drogas. De hecho, el informe destaca que desde 1997 "el consumo de cocaína permanece estable en la población general".

No así entre los jóvenes. Casi el 5% de los que tienen entre 14 y 18 años admite haber probado la coca "alguna vez", frente al 3,1% general. El delegado del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, Gonzalo Robles, achacó ese aumento al "exceso de tolerancia" en los horarios y normas de admisión de discotecas y bares, lo que hace que los chicos compartan locales con adultos, informa Efe.

La preocupación del Gobierno es doble: los jóvenes parecen inmunes a sus campañas -el porcentaje de los que han probado la coca se ha duplicado desde 1994- y algunos tienden a asociar sus actividades lúdicas con las drogas. Para la diputada de IU Marisa Castro, este abuso es fruto de la política prohibicionista. Más crítico fue Xavier Trias, de CiU, que aseguró que es un "derroche" invertir en campañas porque "no es verdad que la gente no tenga información suficiente", informa Europa Press. La portavoz del PSOE, Carmen Romero, señaló que el informe intenta "culpabilizar y demonizar a toda una generación, la mejor de nuestra historia".