El Gobierno se desmarca de las críticas contra las parejas de hecho

, El ministro de Trabajo y Seguridad Social, Juan Carlos Aparicio, no desperdició la ocasión ayer, tanto en el Senado como en el Congreso, para atacar a los Gobiernos del PSOE en una respuesta en la que intentó desmarcarse de las declaraciones del presidente de Galicia, Manuel Fraga, y del alcalde de Madrid, José María Álvarez del Manzano, ambos del PP, contra las parejas de hecho. Aparicio replicó a sendas preguntas, de los parlamentarios socialistas Juan Barranco y Amparo Rubiales, explicando que esas opiniones de otros dirigentes del PP eran una "opinión subjetiva", pero dejando caer que en esa materia los Gobiernos socialistas no actuaron.Barranco y Rubiales interpelaron ayer al Gobierno para saber si suscribía unas polémicas expresiones de Fraga, el presidente de la Xunta y fundador del PP, y del alcalde madrileño, en las que, a raíz de la muerte violenta de una mujer, aseveraban que había más violencia doméstica entre las parejas de hecho que en los matrimonios tradicionales. El Ejecutivo eligió al ministro de Trabajo y Seguridad Social para responder en ambas Cámaras.

En el Senado, Aparicio expresó su "respeto" a las exposiciones de otros dirigentes del PP, que definió en cualquier caso como unas "opiniones sin duda alguna subjetivas y libres" y precisó que tampoco comparte "la línea de análisis" de esas expresiones realizada por el PSOE. A Barranco, esa respuesta le resultó insuficiente y fue mucho más duro al descalificar la posición de Álvarez del Manzano como "caduca, carca y reaccionaria".

Etapas de inacción

El ministro acusó entonces a Barranco de estar "más preocupado en interpretar declaraciones que en reconocer que hay etapas en las que se ha podido actuar en esta materia y no se ha hecho", en alusión a una supuesta falta de gestión de anteriores Gobiernos socialistas en esa materia. Aparicio destacó que frente a las opiniones están las actuaciones de su Gobierno, entre las que enumeró que desde hace tres años se dispone de un plan de actuación frente a la violencia doméstica. Más tarde, ya ante los periodistas en el Senado, Aparicio incidió en que Barranco lo que quería era buscar confrontación en el PP más que "reconocer que durante etapas en las que se ha podido también trabajar en esta materia, no se ha hecho nada".

El debate en el Congreso fue similar. Amparo Rubiales arremetió más contra Fraga y recomendó al ministro que le dijera al político gallego las siguientes palabras: "Con Franco tampoco en esto vivíamos mejor y que también había violencia doméstica, y mucha; la diferencia es que ahora es denunciada como tal y perseguida por una sociedad demócrata, libre y menos hipócrita y represora que aquella en la que Fraga era ministro de Franco". La diputada socialista rememoró que "entonces cuando mataban a las mujeres aparecía la noticia en las páginas de sucesos de los periódicos y se calificaba de crimen pasional".