George Segal, uno de los grandes del 'pop art', enterrado en la intimidad
Luchó por "bajar a la escultura de su pedestal"
George Segal, uno de los principales representantes del arte pop norteamericano, que falleció el pasado viernes a consecuencia de un cáncer, fue enterrado ayer en la más estricta intimidad cerca de la granja de New Jersey en la que vivió y realizó su obra. "Segal fue uno de los escultores figurativos más importantes del siglo XX", dijo su agente, David Janis, que le representó desde 1965. "Tenía un conocimiento muy sofisticado y profundo de la gente, y es lo que expresaba a través de su escultura". El artista norteamericano estaba casado desde hacía 54 años, y tenía dos hijos. Segal se dio a conocer por sus figuras de tamaño natural, que retratatan al hombre corriente en su entorno cotidiano. Sus obras siempre tuvieron un fuerte contenido social. Luchó por "bajar a la escultura del pedestal". A principios de los 70 la rodeó de colores vivos, otorgándola una gran brillantez visual. Por aquella época también empezó a realizar encargos públicos en bronce y a poner sus esculturas en la calle. En 1983 realizó Gay liberation, retrato de dos parejas homosexuales que se instalaron en el Christopher Park, en el Village. Una de sus esculturas más recientes, realizada en 1997 para el Memorial de Franklin D. Roosevelt en Washington, recreó, a través de cinco figuras, la cola del pan durante la Gran Depresión.
El olor a pintura
El escultor hablaba a menudo de la influencia que ejerció su primera vocación de pintor en su obra posterior. "Me gusta el olor a pintura, las pinceladas", comentó en una entrevista a Associated Press. "Pero me trasladé a una creación en tres dimensiones porque todos esos conceptos abstractos tan inteligentes y esas ideas tan interesantes sobre arte se quedaban planas en el lienzo".
George Segal nació en 1926, en el seno de una familia judía modesta del Bronx. Su padre poseía una carnicería que pronto vendió para instalarse, en 1940, en una granja del sur de Brunswick, en New Jersey, para criar pollos. Fue allí donde el escultor creó todas sus obras y donde murió.
"La gente llama a lo que hago esculturas, pero yo siento que me encuentro frente a un hombre en su vida diaria", dijo Segal. El éxito tardó en llegar. Pero, en 1962, gracias a colectivas en las que también estaban incluidos artistas como Claes Oldenburg o Yayoi Kusama, pasó a formar parte de los nuevos realistas, uno de los grupos que lanzaron el arte pop.
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