Las instaladoras de gases del hospital de Mataró niegan ser culpables de dos muertes
Representantes de las empresas Carburos Metálicos y Sanmar, que realizaron la instalación de los tubos de gases medicinales del hospital de Mataró, centro en el que murieron dos pacientes por un error en las conexiones que en vez de suministrar oxígeno daban gases anestésicos, afirmaron ayer ante la juez titular del juzgado número 7 de Mataró que la obra se realizó correctamente. Los representantes de estas empresas y el operario que realizó las conexiones aseguraron que, tras acabar el trabajo, en julio de 1998, comprobaron que las tomas de gases funcionaran correctamente y apuntaron que el cruce de tubos que costó la vida a dos pacientes se debió a una manipulación posterior.La versión de los representantes de las dos empresas y del operario convierten en decisivas las declaraciones de los representantes de Fomento de Construcciones y Contratas (FCC), la empresa contratista del conjunto de la obra hospitalaria.
Josep Manté, abogado del comité de trabajadores del Consorci Sanitari del Maresme, que actúa como acusación particular, señaló ayer que Fomento deberá aclarar ante el juez si posteriormente a la intervención de Carburos y Sanmar otras empresas "modificaron, retocaron o ampliaron las instalaciones" y los motivos de estas presuntas reformas. En este sentido, Manté apunta como causa más probable que explicaría la intervención de otras compañías en esta zona del hospital a la posibilidad de un cambio de planos de última hora, lo cual hubiera facilitado la intervención de cualquier otra empresa en la instalación,
También podrán ayudar a aclarar la intervención de otras personas en la obra las declaraciones que prestarán la semana próxima el director técnico de la obra, el ingeniero y el arquitecto técnico. Estos imputados deberán explicar también por qué el Servicio Catalán de la Salud, organismo dependiente de la Generalita, recibió la instalación sin estar totalmente acabada y por qué se autorizó la entrada en funcionamiento del hospital.
Primeros imputados
Los primeros imputados que prestan declaración como presuntos responsables del mal funcionamiento de las tomas de gases medicinales de la sala de tomografía axial computadorizada (TAC), añadieron ayer ante el juez que ellos no tenían ninguna relación directa con Cast, SA, la empresa directora facultativa de la obra, encargada de realizar la evaluación directa. Agregaron que su relación era con FCC, contratista de toda la obra, a la que informó de que la instalación de gases ya estaba acabada y verificada. Posteriormente, la empresa contratista debía ponerse en contacto con Cast para hacer la verificación final.
El abogado del comité de trabajadores del Consorci Sanitari del Maresme señaló que los operarios que instalaron la conducción de gases medicinales no son los únicos responsables del error en la conexión. Manté señaló que cabe exigir responsabilidades a las personas que no comprobaron la obra y a quienes la dieron por acabada y autorizaron su puesta en funcionamiento sin comprobar aspectos "que se ha demostrado que son fundamentales".
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