Listas de espera
En referencia al editorial publicado por su periódico el pasado miércoles 24 de mayo quisiera añadir lo siguiente:1. En el año 1996, el Insalud, órgano que gestiona la asistencia sanitaria en 10 comunidades autónomas y bajo responsabilidad directa de la actual ministra, emprendió un ambicioso plan de actuación contra las listas de espera, basado en la implantación de un sistema de información centralizado de su red de hospitales, que a fecha de hoy ha supuesto un notable avance y un esfuerzo de muchos profesionales por una gestión de la lista más equitativa, básicamente disminuyendo tiempos de demora; nadie ha dicho que hayan desaparecido. En las comunidades autónomas con competencias transferidas, nada semejante a lo anterior se ha llevado a cabo, y si se ha hecho, no se ha dado a conocer.
2. Hablar de descapitalización de nuestro sistema sanitario obliga a precisar y a situarnos en el tiempo. En los últimos tres años de vigencia del nuevo modelo de financiación, el dinero destinado a nuestro Sistema Nacional de Salud ha crecido 3,6 puntos por encima del producto interior bruto nominal, y las previsiones apuntan a una tendencia similar. Antes no debió ocurrir lo mismo.
Las listas de espera son una limitación intrínseca a nuestro modelo de sistema sanitario, por cierto, el mejor del mundo, junto con Francia, según la Organización Mundial de la Salud; su gestión adecuada es tarea de todos; pero para empezar hemos de saber qué es lo que tenemos. Hoy más que nunca se hace necesario un esfuerzo de coordinación e integración de todos los elementos de nuestro sistema sanitario; éste también es el reto.- Jesús García-Cruces. Médico. Madrid
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.