El PNV y EA verán reducidos sus consejeros en la Kutxa

Los partidos de la oposición en las Juntas Generales de Guipúzcoa, EH, PSE y PP, lograron ayer otra victoria parlamentaria sobre la Diputación, regida en minoría por el PNV y EA, al aprobar una iniciativa presentada por los socialistas para modificar la fórmula de designación de los representantes de la institución foral en la asamblea general de la Kutxa.El acuerdo de las Juntas obligará al ejecutivo foral a nombrar a algún representante de los partidos de la oposición para representarle en la asamblea general de la entidad de ahorro, integrada por 100 miembros. Hasta ahora, la Diputación, como entidad fundadora, elegía a sus 11 delegados de acuerdo con la configuración del gobierno foral. Tras la aprobación de la proposición de norma elaborada por el PSE, se deberá respetar la "representación proporcional de cada grupo político" en las Juntas Generales.

El juntero socialista Iñaki Arriola, alcalde de Eibar, afirmó que "la designación de los consejeros la viene realizando el Consejo de diputados, sin tener en cuenta la composición de las Juntas Generales, órgano máximo de representación de Guipúzcoa". "En aras del reconocimiento de la pluralidad de la sociedad expresada en las urnas, resulta conveniente aplicar el criterio de la representatividad", explicó.

Cambio de consejeros

Esta propuesta será sometida a debate en el parlamento provincial para establecer los criterios que deben regir el reparto de los 11 consejeros entre los grupos junteros. El socialista Miguel Buen, alcalde de Rentería, aseguró que "el carácter retroactivo de la proposición obligará a la Diputación a designar a otros consejeros", aunque precisó que este cambio no se producirá antes del verano. EH apoyó esta iniciativa pese a que en las negociaciones que mantuvo con la Diputación para pactar el presupuesto proponía un reparto de consejeros en la Kutxa excluyendo al PSE y al PP.

La designación de los asambleístas de la Kutxa originó recientemente una gran polémica política e institucional entre la Diputación y el Ayuntamiento, que sí introdujo el criterio de la representatividad de los grupos del gobierno municipal y la oposición.

El portavoz del PNV, Xabier Garaialde, juzgó "improcedente" este cambio legislativo porque supone "usurpar una competencia a la Diputación, y esto es muy grave". Según los nacionalistas, la oposición pretende la "desestabilización institucional", porque provocan "una apropiación de competencias que corresponden al Parlamento vasco". La ley de Cajas Vascas, adujo, otorga esta facultad "al Ayuntamiento de San Sebastián y a la Diputación".