_
_
_
_
_
Tribuna:
Tribuna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Las cuentas del señor Mazón

¡No faltaba más! El señor Mazón continua iluminándonos con sus cuentas. O, mejor, con sus cuentos. De hecho, si todas sus interpretaciones son igual de acertadas que las realizadas sobre la liquidación presupuestaria del ejercicio 1999 de RTVV, habrá que convenir que el señor Mazón más bien oficia de cuentista que de contable. Una muy loable vocación periodístico-literaria arrastra al consejero socialista a opinar, no sin ligereza, sobre cualquier cosa que pueda guardar relación con nuestra televisión autonómica. El cuentacuentos vería realizadas sus esperanzas de no ser porque la sociedad valenciana es ya una sociedad adulta, amén de alfabetizada. En este sentido, la cantinela de que los gestores de RTVV son unos despilfarradores manirrotos forma parte ya de un vinilo rayado que no convence a nadie.¿Sabrá el señor profesor que para sumar dos magnitudes, éstas deben ser del mismo género? ¿O esto no se explica en la FP? Sinceramente y sin acritud: no creo que le beneficie ni a él, ni a su partido, ni a la televisión valenciana, que insista en ese cóctel de ignorancia y atrevimiento en que, el señor Mazón ha convertido sus apocalípticas denuncias de deuda y quiebra. Los discursos tremendistas no debieran ser propios de profesores serios como el señor Mazón. Componérselas para poder afirmar que RTVV perdió, el pasado ejercicio, 18.587 millones de pesetas, cuando la cifra real supera ligeramente la sexta parte de ese montante, es pura demagogia sólo explicable en quien no tiene argumentos políticos y, además y para su desgracia, desconoce las reglas más elementales de contabilidad empresarial. Si, como el señor Mazón hace, no contamos como ingresos las aportaciones económicas de la Generalitat, nos encontraremos ante el absurdo de que todas las administraciones públicas son absolutamente deficitarias, hasta el punto de que su deficit prácticamente iguala a su presupuesto. Las aportaciones de dinero público son "ingresos", señor Mazón, y no las puede usted contabilizar como "pérdidas". El señor Mazón desconoce estas cuestiones elementales o, lo que es peor, actúa bajo los efectos de una estreñida mala fe patente y vergonzosa.

En estos momentos, RTVV, a diferencia, por ejemplo, de TV3, no tiene ningún déficit ni endeudamiento privado, lo cual la sitúa en un lugar de privilegio en el sector. Además, el señor Mazón tendría que valorar que los costes empresariales siempre van en consonancia con los objetivos. ¿Qué clase de televisión quiere usted? ¿Una televisión, por ejemplo, sin los derechos de emisión del Valencia, CF? Desde luego, señor Mazón, sería más barata. Pero pregunte usted a sus votantes si es ésa la televisión que desean. RTVV debe cubrir el espacio de una televisión de masas sin perder su carácter de servicio público. Es un difícil equilibrio sí, pero desde luego no se alcanza basculando hacia ofertas elitistas. El señor Mazón, más allá de cuentos y cuentas, debiera aclararse sobre esta cuestión.

La mayoría de los consejeros de RTVV estamos ya acostumbrados a sus historietas -romanços, decimos en valenciano-. Cuando carece de argumentos, inventa cuentos, no como un simple charlatán de feria, pero con tan poca fortuna que deja sus limitaciones demasiado a la vista. Utilizar la televisión pública valenciana como arma arrojadiza en la arena política, es una estrategia civilmente insana que, al alejarse del tratamiento responsable del sector público de la comunicación, evidencia el escaso apego de quien lo hace a la sociedad en la que vive. Lo más grave es que el señor Mazón sabe que miente. Sabe que la liquidación presupuestaria de RTVV ha mejorado notablemente la situación con respecto al año anterior, a pesar del aumento de actividad y de los éxitos de audiencia en un panorama de competencia empresarial cada vez más duro. Sabe que una empresa en expansión, como es RTVV, que aspira a ser un grupo multimedia de referencia en el siglo XXI, tiene la necesidad de invertir permanentemente en innovación e infraestructura de manera que pueda seguir cumpliendo su papel de motor del sector audiovisual de la Comunidad Valenciana.

En este sentido, sorprende que alguien, a quien se le supone cierto conocimiento de RTVV y una formación profesional rigurosa, mezcle desvergonzadamente unos datos con otros intentando confundir a la opinión pública. Mezclar y confundir gastos, aportaciones de capital y modelo de financiación, por ejemplo, demuestra falta de profesionalidad o mala fe. Porque, además, debe saber, por otra parte, que RTVV no puede ni debe tener objetivos estricta ni fundamentalmente comerciales o económicos, sino que debe primar la voluntad de realizar una televisión y radio de calidad orientadas al cumplimiento de un servicio público. Y esto, como es obvio, no se puede lograr sin el apoyo financiero de la Generalitat Valenciana. Pero es que, además, los gastos de RTVV son moderados respecto de otros operadores públicos o privados, tal como se desprende, por ejemplo, del anuario GECA de la televisión, informe profesional y objetivo que el consejero televisivo Mazón parece desconocer.

Las aportaciones financieras de la Generalitat Valenciana a RTVV son imprescindibles, pero no sólo ahora: lo han sido siempre desde su misma creación en 1986 y del inicio de sus emisiones en octubre del 89. Aún más, realizar una televisión y radio de servicio público, atendiendo a los criterios de la Ley de Creación de RTVV, precisará cada día de mayor financiación pública, precisamente por la desventaja que nuestra televisión encuentra en el mercado respecto de las televisiones estrictamente comerciales. A ello cabe añadir que RTVV dispone de dos canales nuevos desde 1997 (Punt 2 y CCV), además de la red propia de transporte y difusión de la señal, y que RTVV invierte más que nunca en inmovilizado para mejorar la calidad de las emisiones. Todo esto sin tener en cuenta que algunas inversiones, como el fútbol en abierto o las nuevas tecnologías y aplicaciones, también se llevan a cabo gracias al celo profesional de los trabajadores de RTVV y con una limitación más que notable en inversiones y recursos. Tampoco es serio ocultar, señor Mazón, que RTVV, a día de hoy, no tiene ningún tipo de endeudamiento privado, lo que le confiere una especial fortaleza en el panorama audiovisual español. Revise, pues, usted sus cuentas y no nos cuente más cuentos, señor profesor.

Antonio Lis es vicepresidente de la Diputación de Valencia.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_