Fujimori logra un tercer mandato a pesar del 30% de votos nulos, según los primeros datos

La cuestionada segunda vuelta de las presidenciales de Perú, a la que sólo acudió el candidato Alberto Fujimori, concitó escaso entusiasmo entre los 14,5 millones de electores y el voto de castigo de aquellos que fueron a las urnas. Según la proyección hecha por le empresa CPI partiendo de los primeros datos oficiales, y con el 25% del escrutinio, Fujimori habría logrado un 49,6% de los votos, el opositor Alejandro Toledo el 15%, los votos nulos sumarían hasta el 30,6% -cuando en la primera vuelta se quedaron en el 2,25%- y los sufragios en blanco el 4,8%. Victoria electoral para Fujimori, pero empate técnico desde el punto de vista político.

Una gran parte del electorado hizo caso a las consignas de Toledo, aunque las elecciones sólo quedarían invalidadas con dos tercios de los votos en la categoría de nulos o blancos. El 15% de Toledo sumado al 30,6% de votos nulos situarían a la oposición en un 45%, a sólo cuatro puntos de Fujimori. Es sólo una lectura política, pero es el mensaje del electorado al presidente, que lograría su tercer mandato consecutivo en estos comicios sin observadores independientes. Algo que no parecía importar ayer al presidente de la oficina de cómputo (ONPE), José Portillo: "El gran observador es Dios". Portavoces del oficialismo señalaron que todo había funcionado como estaba previsto, pero en varios puntos del país hubo acciones de protesta contra el fraude. Sobre las seis de la tarde hora local (una de la madrugada de hoy hora peninsular española) se registraban numerosos enfrentamientos en varias ciudades del interior, con un número indeterminado de detenidos. Sólo en Chimbote, al norte del país, 14 manifestantes fueron detenidos, y en Trujillo, también al norte, el Ejército dispersó a los opositores con tiros al aire.

En Lima, se producían choques entre manifestantes y policías durante todo el día, y en la céntrica plaza de San Martín, el candidato opositor, Alejandro Toledo, concentraba a última hora a miles de seguidores. "Para elegir hay que escoger y aquí no se puede escoger, porque el candidato de la oposición se ha retirado. He venido aquí a votar nulo", señalaba un votante.

Las autoridades electorales mantuvieron hasta el último momento la pantomima electoral de un solo candidato. Las papeletas de votación contenían, como si nada hubiera pasado, la foto y nombre de los dos candidatos. El tribunal electoral rechazó retirar las papeletas de Toledo de los colegios electorales.

Fujimori empezó la jornada del mismo modo que en la primera vuelta, el pasado 9 de abril, con un desayuno ante los periodistas y acompañado de sus dos hijas y de los candidatos a las dos vicepresidencias de su candidatura, Francisco Tudela y Ricardo Márquez. Descartó la inestabilidad y el aislamiento internacional de Perú.

Toledo recorrió varios comedores en el cinturón de Lima, y aprovechó para afirmar: "Hoy empieza la tercera vuelta para nosotros. Es el inicio de una resistencia pacífica para reclamar el derecho de vivir en democracia". Dijo tener la percepción de una gran ausencia en las urnas, aunque precisó: "Nadie podrá verificar los resultados, por lo que no sabremos qué ha ocurrido".

El líder opositor alertó de una campaña de miedo "como parte de una estrategia del Servicio de Inteligencia Nacional" y advirtió de la existencia de "un operativo policial y militar" con la detención de jóvenes acusados de subversivos y cómplices con el terrorismo. Sin la presencia de observadores, la comunidad internacional aguarda el resultado de una elecciones carentes de legitimidad. Fuentes diplomáticas indicaron que varios países de la UE y EEUU ya estudian sanciones.