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China entrará en la Organización Mundial de Comercio antes de fin de año

China entrará en la Organización Mundial de Comercio (OMC) a finales de este año, mucho antes que Rusia, según confirmó ayer en Ginebra Mike Moore, director general de este organismo. Es el resultado de la histórica votación de la noche del miércoles en la Cámara de Representantes de EEUU, que dio luz verde a la normalización de relaciones comerciales entre la primera potencia del planeta y el gigante asiático. Pekín se felicitó ayer por la "sabia" decisión de los congresistas norteamericanos.El Gobierno chino, no obstante, hizo constar su "indignación" por el hecho de que, al equiparar comercialmente a China con Japón y la Unión Europea, la Cámara de Representantes añadiera una cláusula exigiendo una revisión anual del estado de los derechos humanos en el país más poblado del mundo. Esa cláusula, dijo en Pekín el portavoz del Ministerio de Comercio, es una "injerencia" en los asuntos internos chinos. [Ayer, el Ejército chino comenzó unas maniobras militares frente a la costa de Taiwan. "Esperamos que los nuevos líderes de Taiwan observen claramente la situación y se abstengan de dar pasos que puedan perjudicar las relaciones a través del estrecho o la estabilidad de la región", declaró Zhang Qiyue, portavoz de Exteriores, informa Efe.]

Esa polémica no ensombreció la alegría con que los reformistas de Pekín acogieron el hecho de que el Congreso norteamericano dé por terminadas más de dos décadas de "excepcionalidad" de China a la hora de hacer negocios. La alegría era compartida por las grandes empresas de EEUU, que invirtieron millones de dólares en una campaña a favor de la ley.

Pero quizá la persona más feliz era Bill Clinton. Ha conseguido una victoria que figurará entre los grandes hitos internacionales de su legado presidencial. Clinton ya no será recordado tan sólo por la prosperidad norteamericana y su juicio por el caso Lewinsky, sino también por el deshielo de las relaciones entre Washington y Pekín, los dos principales protagonistas en potencia del siglo XXI.

Más seguro y más próspero

El mundo será "más seguro y más próspero" como consecuencia de la normalización de las relaciones entre EEUU y China, dijo ayer el eufórico Clinton. Criticado durante los últimos siete años y medio por su débil y oportunista política internacional, a Clinton nadie puede negarle que ha sido un gran defensor de la promoción del libre comercio. En su historial ya figuran dos grandes pasos en esa dirección: la ratificación en 1993 del Tratado de Libre Comercio (TLC) con Canadá y México y la normalización entre EEUU y China. Y una gran derrota: la negativa por la Cámara de Representantes a concederle manos libres (fast track o vía rápida) para negociar acuerdos comerciales con Chile y otros países latinoamericanos en septiembre de 1998.

El gran escollo para la ley de normalización de los negocios con China era la Cámara de Representantes, donde la mayoría de los congresistas demócratas son muy sensibles a las opiniones de unos sindicatos que temen que las empresas de EEUU inviertan masivamente en el país asiático, con la consiguiente pérdida de empleos en la metrópoli.

Pero gracias a los esfuerzos personales de Clinton, la presión empresarial y el apoyo de los republicanos, con su candidato presidencial George Bush al frente, la ley sobre China fue aprobada el miércoles por 237 votos a favor y 197 en contra. Ahora pasa al Senado, que la bendecirá en junio. La decisión norteamericana tiene inmediatas consecuencias. Queda expedito el camino para el ingreso de China en la OMC, pactado por Pekín con Washington en noviembre de 1999 y con Bruselas la pasada semana. "La incorporación de un cuarto de la población del mundo a un sistema basado en unas reglas y un método de solución de las disputas es un acontecimiento notable", dijo ayer Moore.

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