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Los socialistas y CDN insisten en que la ley de farmacias es inconstitucional

VIENE DE LA PÁGINA 1 El presidente navarro, Miguel Sanz, ofreció un consenso con las demás formaciones en la ponencia que desde ahora debatirá la llamada ley Cervera y que, con toda probabilidad, cambiará de forma drástica algunos de los criterios de la futura regulación. Aunque los grupos discutieron ayer largamente sobre la constitucionalidad del proyecto, todos estuvieron de acuerdo en que las pretensiones del consejero son positivas y coincidieron en criticar el corporativismo de los farmacéuticos asentados a la hora de defender el actual sistema de apertura de establecimientos.

El propio presidente Sanz señaló en su intervención ante el pleno del Parlamento que la única pretensión de UPN con esta ley es mejorar la calidad de la atención farmacéutica y abrir el sector a más profesionales. "Es un sector excesivamente rígido y controlado por grupos profesionales cuyo estatus se ha obtenido a menudo", afirmó Sanz, "a golpe de talonario o por simple herencia, pero casi nunca por méritos propios, sean profesionales o académicos, y eso debe cambiar".

Sanz ofreció la creación de una ponencia parlamentaria para debatir el contenido del proyecto. PSN-PSOE y CDN estiman claramente anticonstitucional el proyecto porque vulnera la legislación básica del Estado, que regula la apertura de oficinas de farmacia basándose exclusivamente en módulos poblacionales y de distancia. El proyecto de UPN garantiza a todos los farmacéuticos ya asentados el concierto con el Sistema Navarro de Salud (SNS) hasta la jubilación del titular para seguir dispensando medicamentos recetados por Osasunbidea, pero, a partir de esos mínimos, abre la posibilidad de abrir nuevas oficinas de farmacia, que sólo podrán dispensar medicamentos del SNS si obtienen la concertación individual con Salud.

El Colegio Oficial de Farmacéuticos, los socialistas y CDN recordaron que los propios informes de la asesoría jurídica del Gobierno advirtieron del riesgo de que el Estado recurra esta nueva regulación ante el Tribunal Constitucional. Cervera reiteró la existencia de otros informes que avalan la constitucionalidad del proyecto de ley. Pero PSN-PSOE y CDN insistieron en que Navarra sólo tiene autonomía para regular el sector dentro del marco constitucional.

"Es una ley progresista", subrayó Cervera, "que no está orientada por criterios economicistas para reducir el gasto farmacéutico, sino modernizar la asistencia sanitaria y mejorar la calidad en la atención al ciudadano".

Juan José Lizarbe aseguró en nombre del PSN-PSOE, que vio derrotado hace dos meses un proyecto alternativo, que el lobby farmacéutico se alegra de que UPN tramite su ley porque el Constitucional la anulará y todo quedará como antes. Juan Cruz Alli (CDN) abogó por reducir los módulos de población y distancia entre farmacias liberalizando en la práctica el sector, pero respetando la normativa estatal.

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