Constructoras andaluzas harán 1.000 casas en zonas afectadas por el 'Mitch'

El primer proyecto para edificar viviendas sociales en los países centroamericanos afectados por el huracán Mitch, que se realizará con recursos aportados por la Junta de Andalucía, está ya ultimado. La novedad de esta iniciativa de cooperación y solidaridad, a la que se destinarán globalmente entre 2.000 y 2.400 millones de pesetas para construir un millar de casas, reside en la vinculación de los fondos públicos a un proyecto concreto, que permitirá visualizar el resultado final de las ayudas y controlar el uso de los fondos.

Esta actuación, que partió de la Consejería de Obras Públicas y Transportes, se gestó durante una visita de los responsables del departamento y de una delegación de empresarios andaluces a la zona dañada por el huracán. El anterior consejero de Obras Públicas, Francisco Vallejo, optó por canalizar las ayudas de cooperación de la Junta hacia un proyecto duradero sobre el que la Administración autonómica tuviese el control hasta que se materializase.Un grupo de empresarios formaron la sociedad Constructora Andaluza por Centroamérica para dirigir el proyecto y canalizar los fondos aportados por la Junta. Esta empresa, que preside Enrique Román, agrupa a 14 constructoras radicadas en la comunidad, que se encargarán de ejecutar las urbanizaciones. El programa de cooperación contempla la construcción de unas 250 viviendas en cada uno de los países más afectados por el huracán (Guatemala, El Salvador, Nicaragua y Honduras). Constructora Andaluza por Centroamérica aglutina a firmas que operan en todas las provincias andaluzas. Entre las 14 empresas asociadas se ronda una facturación anual de 200.000 millones de pesetas y se da empleo directo a unas 2.000 personas.

El primer programa de la sociedad, que incluye la construcción de 250 casas en el golfo de Fonseca, en El Salvador, está ya concluido. La ejecución de esta obra, que tendrá una inversión próxima a los 500 millones, comenzará en verano, una vez culminados los trámites administrativos. Una delegación empresarial se reunirá la próxima semana en Madrid con el embajador de El Salvador para informarse de los requisitos fiscales y burocráticos que deben resolver antes de comenzar la obra.

Enrique Román, presidente de Constructora Andaluza por Centroamérica, explicó que la intención de la sociedad es construir las viviendas con mano de obra local y limitar los desplazamientos a los países al personal técnico necesario para supervisar el trabajo. "Otro de los objetivos es ayudar a la formación del personal de cada país", dijo.

De igual modo, la intención de los constructores andaluces es adquirir la mayoría de los materiales en los países donde se construya y limitar los envíos a los elementos prefabricados que no puedan comprarse en la zona. La aportación de los empresarios, según Román, consiste en el precio de la obra. "Como es una iniciativa de solidaridad, nuestro compromiso es hacerlo casi a precio de coste", señaló.

El proyecto urbanístico diseñado para la primera actuación busca cierta uniformización con el entorno para evitar "una obra suntuosa". Las casas proyectadas para El Salvador tendrán dos habitaciones, un patio y un aseo. Además de las viviendas, la actuación contempla las obras de abastecimiento, viales y urbanización.