Pérez Villalta expone 'paisajes homéricos' y 'cuadros góticos'

El pintor Guillermo Pérez Villalta, que cumplirá 52 años en 2000, declaró ayer que le gustaría "ir ganando terreno a la vida y dejar el terreno del arte". Mientras intenta "poder vivir más", presenta hasta el 10 de junio, en la galería Soledad Lorenzo, de Madrid (Orfila, 5), un conjunto de 27 cuadros pintados "de forma muy laboriosa" en los últimos cuatro años en sus estudios de Sevilla y Tarifa. Aparecen agrupados por series: obras clasicistas, cuatro representaciones, tres paisajes homéricos, cuadros góticos, fábulas, modern confort e invenciones."Trabajo mucho más con la cabeza que con las manos", señala Guillermo Pérez Villalta ante los personajes y geometrías que en temple sobre lienzo cuelgan en la sala. Tras la pintura mate y translúcida aparecen los rasgos de cálculo que aplica el artista en sus composiciones meticulosas.

"El tiempo de elaboración tiene un lado muy atractivo, que es como meterse en una droga, te aísla del mundo. Es apasionante, pero te chupa la vida. Es un estilo antiordenador, porque se ve que está hecho a mano. Me encanta ver que el ser humano es capaz, con medios primitivos, de crear algo maravilloso", dice el artista.

Pérez Villalta se niega a tener un estilo artístico. "Me parece una condena que un artista tenga un estilo. Prefiero la posibilidad de muchos caminos, que es lo que me divierte y me enrolla". Varios de los cuadros expuestos indican una dirección que busca el artista, como es la unión de arquitectura y artes plásticas. Mientras espera construir un espacio real, el edificio para la Cámara de Comercio de Algeciras (las obras están paralizadas), pinta una serie sobre detalles constructivos inventados a partir de fotografías.

La sala presenta otras series en espacios concretos cuyas descripciones se pueden seguir con los textos del propio artista en el catálogo. De esta forma se identifican los rasgos y las intenciones del pintor con la luz y la geometría, la tradición de la pintura de Occidente, la representación de los pensamientos , el juego de los paisajes, el interés por lo ornamental y lo simbólico, las fábulas clásicas y las invenciones a partir de la orfebrería bizantina y medieval. "Tienes que visualizar tus ideas, y utilizo el lenguaje iconográfico que ha existido en la historia del arte".