La no fusión de Telefónica
Como un motor que gira sobre sí mismo pero que no logra arrancar, el capitalismo en Europa aún balbucea en el camino hacia su madurez. La semana pasada se supo que los planes de fusión de KPN y Telefónica estaban en peligro de ser echados a pique por la tentativa del Gobierno español de bajar los humos del presidente de Telefónica, Juan Villalonga, (...) y aunque la fusión recibió el apoyo mayoritario del Consejo de Administración de Telefónica, a pesar de las presiones recibidas por parte del Gobierno, KPN rompió las negociaciones ante esta falta de consenso. Negociaciones de fusión se rompen frecuentemente sin la ayuda de ningún Gobierno, (...) pero en el caso de Telefónica, parece que tanto por razones personales como políticas, Villalonga ha atraído la cólera de sus hasta ahora aliados en el Gobierno español, que ha tomado cuerpo en esta embarazosa desautorización pública. El Gobierno español ha negado cualquier intervención directa sobre los accionistas de Telefónica, pero, al mismo tiempo, ha aclarado que su desagrado por esta operación era bien conocido. Este episodio reciente no va a ayudar al Gobierno español. (...) Es decepcionante que José María Aznar, cuyo liderazgo en España es un ejemplo a seguir en Europa, haya permitido que un desencuentro personal con Villalonga empañe su buen criterio. (...) Una interferencia continuada del Gobierno español en los negocios de Telefónica puede bloquear su motor (...) y convertir una exitosa historia en un arranque en falso.Nueva York, 9 de mayo
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.