Los candidatos mexicanos de la oposición hacen campaña en EEUU

Los dos principales candidatos de oposición en las presidenciales mexicanas del 2 de julio hacen campaña en EEUU porque en las cocinas y andamios de los Estados sureños se ganan la vida, desde hace décadas, más de ocho millones de compatriotas expulsados de su país por el desempleo y la desesperanza. Afirman que el gubernamental Partido Revolucionario Institucional (PRI) prohibió que voten porque sabe que la mayoría le serían adversos.

La culpa de la diáspora la tiene el PRI, en el poder desde hace 71 años, acusaron Vicente Fox, aspirante del conservador Partido de Acción Nacional (PAN), y Cuauhtémoc Cárdenas, del Partido de la Revolución Democrática (PRD), centro-izquierda. La presencia mexicana y sus votos son tan importantes en Illinois y California que Fox, en su tercer día de gira, intervino ante el Senado de este último Estado para anunciar que, si gana las elecciones, México asistirá, bajo su mandato, a "un nuevo milagro económico", abundante en empleos bien remunerados. Le respondió desde la capital mexicana Francisco Labastida, el contendiente del PRI. "La oferta de Fox, su populismo de derechas, llevaría a la crisis", dijo durante la presentación de su libro La gente hace el cambio. "No se puede pensar que se va a gastar 4,5 puntos adicionales del producto interior bruto [PIB], (...) y al mismo tiempo reducir impuestos, quitar muchos impuestos, generando un déficit de cerca del 10% del PIB", afirmó.

No sólo el candidato del partido conservador ofreció el oro y el moro; también lo ha hecho Labastida, que prometió una infancia ducha en inglés y en Internet, cuando millones no saben leer ni escribir, o hablar en español. Vicente Fox, siempre atento al perfil y humor del auditorio, tenía previsto arremeter en California contra las políticas migratorias y contra el narcotráfico de Washington, según el texto del discurso entregado a la prensa, pero finalmente se decidió por una intervención cordial, conciliatoria. Traje negro y camisa blanca, el candidato de las botas vaqueras y los exabruptos políticos dijo que las presidenciales no significarán un mero cambio de gobierno, sino de régimen.

Urnas en la frontera

Varias organizaciones mexicanas radicadas en Los Ángeles prometieron a Cuauhtémoc Cárdenas movilizarse para que sus familiares en México voten por su candidatura, y al mismo tiempo emprender una campaña con el eslogan "Voting for Cárdenas es voting for me". El ex alcalde de Ciudad de México invitó a todos a acercarse a la frontera y votar en las urnas establecidas en la divisoria con EEUU, desde Baja California Norte a Tamaulipas, que sus colaboradores consideran insuficientes. Héctor Alvarado, presidente de la organización Pro Uno, anticipó que el 2 de julio una caravana de electores mexicanos partirá de la capital norteamericana hacia la frontera para invitar a sufragar durante el recorrido. De acuerdo con una encuesta publicada por Ben Garza, con una muestra de 814 mexicoamericanos, el 49% votaría a Cárdenas, el 33% a Fox y el 14% a Labastida.

Las arremetidas de Cárdenas contra Fox en Los Ángeles, su alejamiento personal y político, demuestran hasta qué punto es difícil la pretendida alianza opositora contra el partido del Gobierno, la agrupación de fuerzas reclamada por la mayoría de los mexicanos, según las encuestas. "Yo estoy aquí para reunirme con los connacionales; él viene a entrevistarse con los rancheros, con quienes contratan paisanos para explotarlos. Me parece que Fox ya encontró trabajo para los próximos años: enganchador [reclutador] de ilegales".