Bibliotecas olvidadas
Bajo el título de Las bibliotecas vascas prestaron medio millón de libros a domicilio en 1999 su periódico publicó el pasado lunes 24 de abril un amplio artículo en el que en ningún momento se menciona la red de bibliotecas municipales de Donostia.Ésta está compuesta por la Biblioteca Central -Alderdi Eder (temporalmente situada en los bajos del Ayuntamiento donostiarra), la Biblioteca Central -Sección Histórica (en la plaza de la Constitución), la Biblioteca Infantil, y las siete bibliotecas de los diferentes centros culturales situados en los principales barrios de la ciudad. Son en total diez espacios que albergan el servicio bibliotecario municipal, con gran penetración entre los usuarios donostiarras, como demuestran los datos recogidos en la memoria de DONOSTIA KULTURA 1999.
Resaltaría que estamos hablando de 193.054 préstamos y 27.866 socios en 1999, cifras que superan los datos de otras instituciones resaltados a su vez en la entradilla del artículo mencionado.
El "olvido" es considerable al tratarse de un reportaje en el que se subraya entre líneas que trata de bibliotecas públicas de las tres capitales vascas, de centros de prestamos de libro a domicilio, de socios de biblioteca, de bibliotecas municipales de barrio... justo de todo lo que, en definitiva, constituye la red de bibliotecas municipal de Donostia - San Sebastián.- Ramón Etxezarreta. Concejal de Cultura de San Sebastián.
Estoy harta
Voy a exponer lo que siento esperando que sirva de reflexión para todos, al margen de política, religión o ideologías. Simplemente visto desde un prisma ético personal. Soy una joven normal, trabajo, soy católica pero no practicante. No soy ni conservadora ni radical.Estoy harta de escuchar cómo nos manipulan desde el sistema y adormenecen nuestras conciencias. y el mensaje es: tanto tienes, tanto vales; y esta es su formúla: dinero + poder = felicidad.
La realidad es que cada vez somos más egoistas e insolidarios, no nos miramos a la cara, a las personas mayores les retiramos como basura. Hay 3.000 millones de personas en el mundo que sobreviven con tres dólares diarios (y somos 6.000 millones en total); otros, simplemente se mueren de hambre, niñas que se prostituyen desde la infancia y niños que trabajan desde que aprenden a hablar.
La verdad es esta: cada vez tenemos más, pero cada vez estamos más amargados, depresivos y estresados... y mientras pasa nuestra vida, cerramos los ojos para no verlo... ¿cuándo los abriremos?- Bernardette Rozas Muñoz. Getxo.
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