Los socialistas de Gandia avalan su gestión con un informe del interventor

La minoría socialista que sostiene a Josefa Frau al frente de la alcaldía de Gandia se ha enzarzado en una guerra de desmentidos y acusaciones con el Bloc Nacionalista Valencià, que ha denunciado la "caótica" situación económica del Ayuntamiento, a raíz del debate de los presupuestos municipales para el año 2000. Los socialistas contraatacaron el jueves y esgrimieron un documento del interventor municipal que avala la gestión desarrollada por el responsable de Hacienda durante 1999.

El documento del interventor, que fue presentado por el concejal de Hacienda, José Manuel Orengo, mostraba un resultado "positivo" correspondiente al ejercicio de 1999, con unos ingresos de 534 millones de pesetas. Con ello, los socialistas rebatían las acusaciones del Bloc sobre la existencia de un grave déficit económico en las arcas municipales, que fue el detonante, la pasada semana, de la ruptura de relaciones entre ambos partidos.Los nacionalistas exigieron la renuncia del titular de Hacienda, al que culpaban de la "caótica" situación económica del consistorio, como condición ineludible para ofrecer su apoyo a los presupuestos municipales para el año 2000.

Los nacionalistas también exigieron un plan de reducción de la deuda, que incluyera el retorno del personal eventual y la rebaja de los sueldos de los concejales hasta la cantidad previa a las últimas elecciones municipales, así como un aumento del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) del 15%.

El grupo socialista utilizó el informe de la intervención para avalar la gestión de José Manuel Orengo al frente del departamento municipal de Hacienda, y se mostró dispuesto a proponer una subida del IBI del 13%. Pero lejos de limar diferencias, el documento complica todavía más las relaciones entre ambos partidos, ya que el portavoz del BNV, Emili Selfa, había pedido a los socialistas un "gesto" de honestidad, y que "asumieran las responsabilidades políticas ante la precaria situación económica", si querían que su grupo cambiara de postura y devolviera el apoyo al gobierno local.

"Desde el Bloc pensamos que hay mil salidas, pero la única imperdonable es decir que los números son mentira y tratar de matar al mensajero que las denuncia", advirtió Selfa.

Los grupos municipales del PSPV, PP y BNV se ha reunido esta semana en dos ocasiones, en una junta de portavoces y una comisión de gobierno, sin que haya sido posible acercar posturas sobre los presupuestos municipales, por lo que las negociaciones se reanudarán las próxima semana.

La situación política del consistorio gandiense se encuentra en estos momentos, y a juicio de todos los partidos, en la misma tesitura que después de los comicios municipales.