Visto para sentencia el juicio por la muerte del etarra que cayó por una ventana

Todas las partes personadas en el juicio por la muerte del miembro de ETA Xabier Kalparsoro, fallecido tras caer por la ventana de la Jefatura Superior de Policía de Bilbao el 23 de septiembre de 1993, elevaron a definitivas sus conclusiones, salvo pequeñas modificaciones. Las tres acusaciones personadas, en representación de la familia del fallecido, el Grupo contra la Tortura y el Ayuntamiento de Zumaia, localidad natal del etarra, mantuvieron la acusación de "imprudencia temeraria" contra los cuatro policías, aunque adaptaron la petición al Código Penal vigente tanto en la denominación del delito, "homicidio imprudente", como en la solicitud de pena. Antes este delito acarreaba seis años de prisión e inhabilitación. Ahora, tal y como solicitaron las acusaciones para cada uno de los cuatro acusados, la pena es de cuatro años de cárcel y seis de inhabilitación. El juicio quedó visto para sentencia.En su argumentación final, las acusaciones coincidieron en que "ninguno de los cuatro policías adoptó las medidas de seguridad exigidas por la ley para velar por la vida e integridad del detenido", máxime cuando se le mantuvo sin esposar y custodiado por un solo agente, pese a que tenían conocimiento de que era un miembro de ETA, se había mostrado violento durante su detención y mostraba síntomas de estar "ebrio".

Esta versión de los hechos fue rechazada por la fiscal, que pidió la absolución de los agentes, para quienes "era imposible prever el cambio de conducta de Kalparsoro", que se había mostrado tranquilo hasta el momento en que derribó al policía que le custodiaba y se tiró por la ventana. El ministerio fiscal defendió que se le tratará como un detenido "normal" a pesar de ser de ETA, y negó que los agentes pudieran saber que se había mostrado agresivo con anterioridad, ya que la Policía Municipal de Durango no informó de este detalle en el momento de la entrega, ni tampoco de los síntomas de "embriaguez" que presentaba.

Las defensas también pidieron la absolución por considerar que la única "conducta imprudente que se produjo fue la de Kalparsoro, con una reacción imprevisible para los policías".