Continúa la búsqueda del joven que supuestamente mató a su familia

La policía continuaba anoche la búsqueda del jóven de 16 años que presuntamente asesinó a sus padres, Rafael y Mercedes, de 51 y 50 años, y a su hermana María Mercedes, de nueve, el sábado en Murcia. Los expertos en psiquiatría aventuran que José R. P. pudo sufrir un brote psicótico o una patología no diagnosticada que le llevó a matar con una espada de samurai a su familia en el barrio de Santiago el Mayor.La orden de búsqueda y captura ha sido distribuida por todas las comisarías españolas, si bien las pesquisas se centran en Murcia y Alicante, donde el presunto autor del triple crimen solía acudir los fines de semana con sus amigos, informa Santiago Navarro.

La única pista de que disponen las fuerzas de seguridad parece ser la descripción de un vecino que dijo haber visto a José en las proximidades del lugar de los hechos circulando en un ciclomotor con otro joven.

En ese momento, José, que mide 1,70 y tiene el pelo liso y castaño, vestía pantalón vaquero y la chaqueta de un chándal. Incluso algún vecino, amigo de la familia, se sumó ayer a la búsqueda para convencerle de que se entregue.

De momento las investigaciones de la policía apuntan a que el chico, del que los vecinos dicen que "tenía todos los caprichos y no le faltaba de nada", actuó en solitario y con ensañamiento, a la vista del estado de los cuerpos, que ayer permanecían en el Instituto Anatómico Forense de Murcia. Los tres presentaban numerosas heridas y el padre tenía la cabeza prácticamente seccionada.

Funerales

Hoy lunes está previsto que tenga lugar el funeral, en la parroquia de Santiago el Mayor, situada a escasos metros del domicilio donde vivía la familia, si bien dependerá de que hayan concluido los exámenes forenses.

José R.P. había abandonado los estudios de bachillerato en el instituto Mariano Vaquero de Murcia y estaba realizando un curso de Garantía Social para aprender un oficio, si bien su asistencia al mismo era "irregular".

La jefa de estudios del instituto, Juana Estramera, lo describe como un chico "tímido y retraído, pero que estaba perfectamente integrado y tenía amigos". "Lo único que le pasaba es que estaba apesadumbrado porque su hermana pequeña padecía síndrome de Down", comentó a La Verdad.

El director del Mariano Vaquero, Enrique Amata, comentó a Efe que el chico no había mostrado "una actitud violenta ni conflictiva" en el instituto. Eso sí, "no tenía especial predisposición para estudiar como le ocurre ahora a muchos alumnos".

Entre las aficiones conocidas de José se encuentran la práctica de artes marciales como son el taekwondo y el full contact. A finales del pasado verano su padre, Rafael, le había comprado la katana o sable de samurai con el que presuntamente dio muerte a su familia. Entre los libros relacionados con la brujería y el satanismo que poseía el joven la Policía Judicial encontró otras armas blancas.