Tomatito y Michel Camilo fusionan hoy flamenco y jazz en San Sebastián

En una época como la actual, en la que el mestizaje se ha impuesto como vía de crecimiento en el terreno musical, aventuras conjuntas como la emprendida por el guitarrista andaluz Tomatito y el pianista dominicano Michel Camilo tienen total razón de ser. Así, su actuación de hoy (20.00) en el Kursaal donostiarra tiene un profundo carácter contemporáneo, nada anacrónico, pese a sustentarse en géneros añejos como el jazz y el flamenco. Los mismos estilos que funden y manejan a su antojo en el disco Spain, primera referencia de Lola Records, discográfica recientemente creada por el director de cine Fernando Trueba.Aun siendo independiente del viejo proyecto que pretendía unir a los dos artistas con el turco Arif Sag, esta colaboración resarce, en parte, a quienes se quedaron con ganas de ver hasta dónde podría dar de sí el trabajo del trío. Y lo hace con un álbum de jazz aflamencado, o de flamenco jazzy, y con la consiguiente serie de conciertos conjuntos por diversos teatros y auditorios.

Dicha gira brindará la oportunidad de escuchar en el Kursaal brillantes versiones de piezas que no precisan presentación, como Bésame mucho, el Spain de Chick Corea o el Concierto de Aranjuez, repertorio que quizá acrecente el interés del gran público por un álbum arriesgado en el que únicamente suenan guitarra y piano. Un trabajo cuya realización fue propuesta por su productor ejecutivo, Julio Martí, en 1997, durante el Festival de Jazz de Barcelona.

En una grabación

De todos modos, es de suponer que Spain no se hubiera convertido en realidad si ambos artistas no se hubieran conocido durante la grabación de Pa gente con alma, de Ketama. Allí entablaron amistad y se abrieron aun más los horizontes creativos de Michel Camilo, un pianista precoz que compuso su primera canción con sólo cinco años y que ya pertenecía a la Orquesta Sinfónica Nacional de su país natal con 16.

Camilo continuó sus estudios en Nueva York, lugar al que su mudó en 1979 decidido a forjar una carrera como solista en la que ha despuntado, además de por la agilidad y velocidad con las que desplaza sus dedos por el teclado, por su destreza al fundir el jazz con los ritmos caribeños.

Hoy en día, Camilo puede presumir de que su nombre ha sido pronunciado en entregas de los premios Grammy, de haber compuesto la música de tres largometrajes (dos de Emilio Martínez-Lázaro y otro de Trueba), y de que a sus discos no les es extraña la presencia en las prestigiosas listas de ventas Billboard. Así, debe de ser todo un honor compartir escenarios con él para José Fernández Torres, Tomatito, guitarrista que ganó buena parte de su actual reputación como escudero de Camarón de la Isla, a quien acompañó 18 años.

Tras la muerte del mítico cantaor, el almeriense se ha prodigado más como concertista, pero también ha tocado, entre otros, junto a José Mercé, Pansequito, Enrique Morente y Carmen Linares y ha colaborado con otros artistas vinculados al jazz, como Chano Domínguez.