Un informe muy peculiar

Un muy peculiar informe jurídico que afirma, entre otras cosas, que la regulación de las parejas de hecho es inconstitucional porque excluye las uniones no matrimoniales de parientes directos consanguíneos (hermanos o padres e hijos, por ejemplo) es la excusa en que se ha amparado el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Pamplona, en manos de UPN-PP, para paralizar la creación en la ciudad de un registro de uniones no matrimoniales.El consistorio aprobó el pasado 3 de febrero, con la abstención de UPN y el voto a favor de los ediles de todos los demás grupos (socialistas, CDN, Izquierda Unida y Euskal Herritarok), crear un registro de parejas de hecho, incluidas las homosexuales. La decisión se anticipó a la que el Parlamento foral adoptó la pasada semana en igual sentido, de nuevo con la única abstención de UPN y el voto a favor de los demás grupos.

La alcaldesa de Pamplona, la regionalista Yolanda Barcina, pidió entonces un informe jurídico al secretario municipal, Jesús Lorda, que analizase el proyecto de ordenanza aprobado por el pleno. Con el informe en la mano, la alcaldesa ha paralizado el mandato del pleno atendiendo a las conclusiones del mismo, que señalan que "el proyecto de reglamento no se ajusta a derecho al pretender un régimen discriminatorio que no respeta la igualdad de los ciudadanos ante la ley, pues si bien los iguala por razones sexuales, los discrimina por razón de parentesco".

El secretario municipal asegura en su informe que no aprecia "diferencia alguna" entre la discriminación que la actual legislación del matrimonio establece hacia otro tipo de uniones (las homosexuales, por ejemplo) "con otras discriminaciones [...] como serían las restricciones por parentesco, cuyo origen, aun no explícito, parece estar basado en concepciones ajenas o extrañas a los principios actuales de la libertad sexual entre mayores de edad". Lorda añade que se vulneran de esta manera dos artículos de la Constitución: el 9.2 (los poderes públicos promoverán la igualdad de los ciudadanos y removerán los obstáculos que impidan o dificulten su plenitud) y el 14 (igualdad de todos los españoles ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación por causa alguna).

Tanto el proyecto de reglamento de parejas de hecho del Ayuntamiento como la proposición aprobada en el Parlamento foral, ambas tramitadas a instancias de Izquierda Unida, excluyen de la regulación como "pareja estable" a las que tengan "vínculo de consanguineidad o adopción en línea recta" o "consanguineidad hasta el segundo grado lateral", siguiendo en este punto lo que establece el artículo 47 del Código Civil, que impide el matrimonio en esos casos de relación.

De igual modo, Lorda califica en su informe de "erróneo y regresivo" el invocar el criterio de asimilación de las "parejas estables" a las uniones libres basándose en la existencia de una relación de "afectividad análoga a la conyugal". El secretario pamplonés entiende que "tal afectividad no es ni puede ser exigible para casarse por ser un sentimiento que pertenece a la intimidad personal y cuando es evidente", añade el informe, "la falta de afectividad en algunos matrimonios sin que dejen por ello de serlo".

Tras exponer todas estas consideraciones, y aún reconociendo la "facultad municipal" de crear un registro de parejas no casadas, el informe concluye atribuyendo una "clara indefinición" a la efectividad de tal registro, ya que podría, subraya el secretario, "crear expectativas de derechos no realizables". El reglamento elaborado preveía la misma consideración administrativa para las uniones matrimoniales y las parejas de hecho.

De momento, la proposición de ley parlamentaria espera ser debatida en comisión en el legislativo foral. El secretario del Ayuntamiento pamplonés no olvidó su existencia y en una nota final reiteró que tampoco el texto parlamentario "resuelve la invocada discriminación" de aceptar todo tipo de uniones independientemente de su sexo, pero prohibiendo al mismo tiempo las de familiares directos.