El PSE pide proponer al presidente de Caja Vital para dar su apoyo político al PP en Álava

Los socilistas condicionaron ayer un acuerdo presupuestario con el PP en las instituciones de Álava a que el futuro presidente de Caja Vital sea un técnico de la órbita del PSE, y a que los populares inviertan más en políticas sociales. El diputado general del Álava, Ramón Rabanera, y el hombre fuerte del PSE en la provincia tras el asesinato de Fernando Buesa, Javier Rojo, comieron ayer para acercar posturas. El PSE descarta entrar en los equipos de gobierno del Ayuntamiento de Vitoria y la Diputación, pero aceptaría un pacto para apoyar los presupuestos de ambas instituciones.

Los resultados electorales del 12-M no han dejado lugar a la duda. Unos 120.000 votos respaldaron en Álava a los partidos constitucionalistas en las últimas elecciones, y tanto el PP, que vio ampliada la mayoría de que disponía, como el PSE, creen que los ciudadanos alaveses no quieren al PNV ni a los nacionalistas en las institucionesde la provincia. Esta es la lectura que ayer hicieron el diputado general de Álava, Ramón Rabanera, y el vicesecretario de los socialistas alaveses, Javier Rojo, durante una comida de trabajo que celebraron en Vitoria. Y en ese sentido comenzaron a trabajar en torno a una mesa. Aunque sólo era una primera toma de contacto, el PP pretende garantizar de una vez la gobernabilidad de las dos instituciones que dirige, el Ayuntamiento de Vitoria y Diputación, mediante el apoyo del PSE a los presupuestos de ambas intituciones, que han tenido que ser prorrogados por falta de una mayoría sufiente. Por su parte el PSE quiere tener la última palabra sobre la persona que ocupará la presidencia de la Caja Vital -el plazo de presentación de candidaturas acaba el próximo martes- y además busca un compromiso en firme de que los populares van a modificar algunas de sus políticas sociales.

El PSE trasladó ayer a Rabanera que van a ser respetuosos con la herencia intelectual de su ex secretario general de Álava, Fernando Buesa, asesinado por ETA, y en ningún caso permitirán que el PNV gobierne, pero tampoco entrarán en los ejecutivos. "Todo los demás es negociable", indicaron ayer fuentes socialistas. El PSE celebrará una reunión de su ejecutiva para ratificar los acuerdos adoptados y confirmar el apoyo presupuestario al PP, si finalmente se llega a un pacto para la presidencia de la Caja.

A pesar de que la gobernablidad de las dos instituciones implicadas y la designación del nuevo presidente de Caja Vital eran temas que las partes querían desligar antes del encuentro, ambas cuestiones estuvieron presentes en la cita. Y eso a pesar de que la negociación de la presidencia de Caja Vital la llevan directamente el socialista Juan Carlos Prieto y el teniente de diputado general Carlos Samaniego.

Fuerzas equilibradas

Será el próximo día 30, con la celebración de la asamblea general de la entidad de ahorro cuando se resolverá la incógnita sobre su control. Ayer, el Ayuntamiento ratificó a sus once representantes, todos ellos pertenecientes a las formaciones constitucionalistas. La eleción del sustituto del actual presidente, Juan María Urdangarín, queda pendiente de cuál sea la relación final de fuerzas o entre los compromisarios. Uno de los grupos que cuenta con cuatro representantes en la asamblea y cuya decisión podría ser decisiva, la cooperativa de vivienda Covivi, anunció ayer que dará libertad de voto. El representante que aportará el municipio de Iruña de Oca a la asamblea de la Vital ha pasado a ser del PNV, lo que aprieta aún más la relación de fuerzas entre PSE, PP y UA y los nacionalistas. En este contexto, el encuentro de ayer entre Rabanera y el vicesecretario del PSE sirvió para acercar posturas y sentar las bases para la gobernabilidad en Álava. El propio alcalde de Vitoria, Alfonso Alonso, señaló antes de la comida que la estabilidad del consistorio está íntimamente vinculada a la de la Diputación y pidió al PSE que "crea y confíe en la posibilidad de instalar un cambio profundo en el territorio histórico de Alava a través de sus instituciones más representativas".

Ramón Rabanera, por su parte, manifestó su satisfacción tras la reunión mantenida con Javier Rojo. Fuentes populares indicaron posteriormente que la actitud de los socialistas había sido "muy responsable" y que habían mostrado "disposición a trabajar para sacar adelante los presupuestos y la gobernabilidad del territorio".