Medio Ambiente expedienta a la incineradora de residuos de Girona

La Generalitat ha abierto expediente sancionador a la empresa que gestiona la planta incineradora de residuos urbanos de Girona, IRSUSA, por irregularidades en el proceso de combustión no subsanadas pese a requerirlo la Junta de Residuos. Según Medio Ambiente, en la planta, situada en Campdorà, se reintroducen cenizas volantes en el proceso de combustión y se almacenan escorias en una zona aluvial no impermeabilizada.

En respuesta a una pregunta parlamentaria formulada por el grupo IC-V, el Departamento de Medio Ambiente afirma que las irregularidades advertidas en la incineradora de Girona "no afectan de manera relevante" a la calidad ambiental. "Los gases de combustión, que posiblemente son más ricos en partículas a causa de las irregularidades, pasan por unos sistemas de filtrado que depuran estas partículas", asegura la Generalitat. También aduce que las escorias libres de cenizas "están clasificadas como residuo no especial y presentan genéricamente una lixiviación mínima".IC-V cree que el expediente abierto "confirma la necesidad de cerrar la planta porque contamina". El concejal de la formación ecosocialista en el Ayuntamiento de Girona, Joan Boada, sostiene que la incorrecta gestión de la instalación "pone en peligro la salud de las personas y el medio ambiente". IC-V asegura que las escorias producidas se almacenan a orillas del Ter, contaminan las aguas fluviales y pueden perjudicar a los municipios que reciben el agua potable de este río.

IC denuncia que "la actitud irresponsable" de reintroducir las cenizas volantes en el proceso de combustión "origina la emisión de contaminantes muy peligrosos para la salud y para el medio ambiente". El expediente sancionador se encuentra en fase de tramitación. La junta propondrá las medidas oportunas si constata que las irregularidades tienen consecuencias negativas para el medio ambiente o la salud de las personas.