La asalariados declaran una renta media anual de 2,3 millones y los profesionales liberales 1,5
En el País Vasco hay 22.000 empleadores y unos 110.000 trabajadores por cuenta propia
VIENE DE LA PÁGINA 1 En Euskadi se da la circunstancia de que el número de personas que está dado de alta en la Seguridad Social coincide con el conjunto de personas que realizan la declaración de la renta, mientras que la cifra de empresarios y profesionales que rinde sus cuentas a las haciendas forales es menor que las altas en actividades profesionales. A juicio de Noval, esta asimetría pone de manifiesto que "es ahí donde se concentran las principales bolsas de fraude fiscal".
De las más de 130.000 declaraciones de renta realizadas en 1996 por empresarios y autónomos, sólo 5.759 reconocieron haber obtenido el año anterior ingresos por encima de siete millones. Los que superaron los 11 millones de base imponible se quedaron en 1.981. Estas cifras no concuerdan con las estadísticas que figuran en los directorios de actividad económica, donde existe un amplio colectivo empresarios, altos cargos directivos, propietarios de establecimientos de hostelería y comercio con varios empleados, trabajadores por cuenta propia y profesionales liberales que, en principio, debería alcanzar los siete millones anuales.
Un problema común
El experto en fiscalidad y catedrático de la Facultad de Económicas de la UPV Ignacio Zubiri precisa en primer lugar que "existen determinadas actividades profesionales que son muy difíciles de controlar, salvo que la Administración tributaria dedique un inspector a la vigilancia de cada contribuyente". "No obstante", añade, "es obvio que las rentas más ocultas son las no salariales, que es un problema común en todos los países".
En el País Vasco se contabilizan algo más de 22.000 empleadores (empresarios) y unos 110.000 trabajadores autónomos. Una parte de ellos, además de otro número importante de ejecutivos y profesionales podría sobrepasar el listón de los siete millones anuales de ingresos. Los estudiosos de la fiscalidad apuntan a este segmento de profesionales como los cobijos principales para la evasión fiscal.
También se da el fenómeno de que los trabajadores por cuenta ajena declaran de promedio rentas más elevadas que el colectivo de autónomos. La renta media declarada por los asalariados rondaba en 1996 los 2,3 millones de pesetas anuales, en tanto que la de autónomos y profesionales liberales (abogados, médicos privados, arquitectos, dentistas, etc.) se situaba en 1,5 millones, con ligeras variaciones según el territorio. Este diferencial se ha ensanchando en los últimos años, debido a que las rentas salariales declaradas han tenido un aumento que no se ha experimentado en las empresariales y profesionales.
Rentas no salariales
Mikel Noval afirma con rotundidad que estas cifras "no se corresponden con la realidad de los ingresos medios que tienen unos y otros, y se explica por el fuerte nivel de fraude existente en las rentas que no son del trabajo". Ignacio Zubiri manifiesta que los asalariados tampoco están al margen de los casos de defraudación, aunque advierte de que el grado de incumplimiento de estos contribuyentes con sus obligaciones fiscales es mucho menor, porque el control de los ingresos en sus fuentes (las retenciones que realizan la empresas en las nóminas) no lo permite. "Pero hay algunos realizan otros trabajos tapadera sobre los que no se ejerce ningún control y tambien los hay que cobran complementos en especie no declarados".
El catedrático de Hacienda Pública también pone el énfasis en que la represión del fraude choca con "las limitaciones prácticas y estructurales de las haciendas, y con las dificultades para demostrar la comisión de un delito fiscal ante los tribunales". Y sin embargo, opina que "está aceptado el alto grado de eficacia de las tres haciendas vascas en la lucha contra el fraude". Aunque nadie se atreve a ponerle cifras al fraude, está constatado que la economía oculta en el País Vasco es menor que en el resto de España.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.