"La industrialización de un país se mide por su máquina-herramienta"

La máquina-herramienta es un mundo tan fascinante para Patxi Aldabaldetrecu (Deba, 1930) que, ya jubilado después de casi 50 años trabajando en el sector, ha realizado una titánica labor de investigación sobre esta actividad que ha cristalizado en la publicación Máquinas y hombres: guía histórica. El libro, un enorme volúmen de casi 500 páginas ilustradas con más de 840 imágenes, repasa desde la prehistoria hasta la actualidad la evolución de la fabricación de herramientas, primero, y máquinas, después.Con un marcado carácter didáctico, la publicación incluye numerosos índices para que el lector ya iniciado pueda buscar fácilmente el tema que más le interesa, así como resúmenes en castellano, euskera e inglés para ofrecer una lectura más abreviada. "El libro se dirige a fabricantes y vendedores de máquina-herramienta pero, sobre todo, a los estudiantes de Formación Profesional e ingenierías técnicas", explica Aldabaldetrecu, que para ilustrar los textos ha rebuscado en su vasto archivo personal.

"Cuando trabajaba yo leía sobre todas las empresas del sector de máquinas herramienta, y cuando asesoraba la compra de máquinas en Orbea fui haciendo acopio de material. La gente tiraba los catálogos de máquinas a la basura, pero a mí siempre me ha gustado la historia y la antropología y los guardaba en cajas", comenta Aldabaldetrecu, quien preside la fundación museo de la máquina-herramienta de Elgóibar. De hecho, ha donado su trabajo y los derechos de la publicación al museo de Elgóibar, que se financiará con la venta de la publicación, en un intento más de difundir la historia de la máquina-herramienta.

"Cuando iba a comprar máquinas a Europa y Norteamérica se extrañaban, porque nos asociaban con el flamenco. Hoy ya saben quiénes somos", sintetiza Aldabaldetrecu. "Esto ocurría porque aquí, con la invasión francesa, las guerras carlistas y otras contiendas, nos incorporamos con 80 años de retraso a este sector, y entonces sólo se podía copiar. Esto cambió en 1981 cuando, con la revolución de la microelectrónica, nos subimos al tren de la tecnología al mismo tiempo que el resto".

Para Aldabaldetrecu, es inimaginable el País Vasco sin el sector de máquina-herramienta que, en su opinión, es un sector por el que se mide el grado de industrialización de un país. "No se puede fabricar ningún objeto metálico sin una máquina-herramienta", sentencia este perito industrial aficionado a la historia. En su libro muestra desde las aportaciones que el hombre prehistórico ha hecho a la técnica actual hasta la historia pormenorizada de los sistemas de rosca y las herramientas de corte. Este repaso histórico se acompaña con una galería que recoge a los fabricantes que han contribuido a que España sea actualmente el octavo productor de máquina-herramienta del mundo.