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El legendario Artime acusa al fútbol argentino El ex goleador denuncia en una entrevista cómo se introdujo el dopaje en su país

Habla poco, cada veinte años, pero cuando abre la boca su voz estremece la conciencia del fútbol argentino. El legendario internacional Luis Artime, de 61 años, uno de los máximos goleadores de la historia, puso nuevamente a cada uno en su sitio. En una entrevista publicada el viernes en Buenos Aires identificó a los responsables de iniciar en la práctica del dopaje a los jugadores argentinos, denunció la corrupción que existe en todos los niveles, incluidos los periodistas, y acusó a la Asociación del Fútbol Argentino(AFA) de ser la responsable máxima de todos los males. Ya lo había dicho cuando recién comenzaba a destacarse y lo ratifica ahora: "A la sede de la AFA habría que incendiarla"."El primero que trajo la droga fue el Independiente que entrenaba Manuel Giúdice en el partido de vuelta de la final por la Copa Intercontinental de 1964. Decidieron papearse (drogarse) en la vuelta, después de que el Inter los pasara por arriba en la ida. Pero el Toto Lorenzo (Juan Carlos Lorenzo, ex entrenador del Boca, de la selección argentina en los Mundiales de 1962 y 1966 y de equipos italianos y españoles) fue el más inhumano de todos. Él la trajo de Europa, cuando estuvo en Italia. A mí no me lo puede negar. Al negro Perotti (Hugo Perotti, ex jugador del Boca) lo mató él, con 24 años no pudo jugar más al fútbol. Cuando yo decía esto era un loco, un subversivo, después se puso el control antidopaje y se empezaron a conocer los casos".

Entonces, ya retirado, después de ser aclamado como un ídolo en el Independiente, el River y el Nacional de Montevideo, Artime había comenzado su carrera de entrenador en el modesto Atlanta, de la segunda división de Argentina, el equipo donde debutó como jugador. Pero habló, dijo lo que pensaba, y a causa de aquellas declaraciones no volvió a trabajar en el fútbol. Nadie más le contrató.

Pero ya antes, en 1961, cuando apenas comenzaba a destacarse, Artime advertía de que "a la AFA habría que quemarla". Ahora, insiste: "Sí, a la AFA hay que quemarla. Estamos cada vez peor. No hay gente en las canchas, no hay competitividad en los torneos. La AFA es una institución rica y los clubes son pobres. Hay que cambiar todo. Sacar hasta los muebles y quemarlos".

"Para Grondona (Julio Grondona, presidente de la AFA y vicepresidente de FIFA) está todo bien. Pero la gente que está acá ve todo, ve lo de la televisión (la concesión de los derechos exclusivos de retransmisión hasta el año 2014), ve esto, ve lo otro. Los pocos que levantaron la mano en contra de él tuvieron que dar un paso atrás. No hay oposición. El poder corrompe, pero por más poder que uno tenga, si se es honesto no tendría que corromper. Acá hay periodistas que compran y venden jugadores, dirigentes que compran y venden jugadores, siempre hay un intermediario en el medio y hay que darle un pedacito. El fútbol no está fuera de la corrupción del país. En este momento hay jugadores de diez años que tienen representantes. Son traficantes de chicos".

Un hijo amenazado

El hijo de Artime, Luis Fabián, delantero centro del Tigre, de Segunda división, sufrió personalmente hace dos semanas las amenazas de la barra brava del club. Su padre reconoce que tiene miedo porque "los mismos que entraron al vestuario se abrazaron con el presidente del club, quien los considera socios con derecho a preguntar. Sí, yo puedo hablar con un hincha y darle explicaciones, pero eso de llevar un revólver y ponértelo en la sién, no".

"Estamos inmersos en una sociedad llena de problemas", conluye, "de violencia, y el fútbol no puede estar aparte. Ahora, por más que les regales la entrada, la gente no va a la cancha. El fútbol argentino me da pena".

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