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Una mujer dirige la policía de la conflictiva ciudad de Bahía

Juan Arias

El Estado de Bahía, donde hace 500 años desembarcaron los portugueses en Brasil, cuya población se compone de un 90% de gente de color, tiene desde ahora a una mujer como directora de policía: Kátia Alves, rubia, alta, guapa, que tiene bajo su responsabilidad a 45.000 policías. Su mano se ha dejado sentir enseguida en la ciudad de Salvador, capital del Estado de Bahía, donde la presencia de los policías mujeres es muy visible. Y es que Kátia ha conseguido que el 45% de toda la policía del Estado sean mujeres, mientras que en el Estado de São Paulo sólo el 10% de la policía es mujer. Hay más. La delegación de Policía de Robos y Asaltos en Bahía, un área destinada normalmente a hombres policías, está en manos de otra mujer, Emilia Blanco. El director de la Academia de Policía de Bahía, Antonio Medrado Alcántara, dijo que las mujeres "estudian más y ganan siempre las oposiciones; son más responsables y leales, dos cualidades fundamentales para un buen policía".

Kátia, casada, madre de dos adolescentes, fue durante 12 años simple policía contra la voluntad de su familia. Su marido, Idailton Oliveira Santos, acabó aceptando su trabajo cuando percibió que "imponía respeto a los policías más viejos". La actual directora de policía destacó en sus primeras actuaciones. Logró resolver crímenes de gran portada, como en 1966, que contra todo pronóstico descubrió al maniaco alemán Gerard Wenzinger, que sembró el terror en Salvador de Bahía violentando y torturando a mujeres.

El gobernador de Bahía, César Borges, ha afirmado que el nombramiento de Kátia al frente de la policía de Bahía se debe a que Kátia "es valiente y tiene la cabeza sobre los hombros". La nueva directora de policía ha adoptado la táctica que tanto resultado dio en Nueva York: castigar la microcriminalidad para evitar la macrocriminalidad.

A quienes dicen que Kátia no hubiese sido nombrada directora si no hubiese sido tan guapa, ella dice: "Es puro machismo. ¿Quién ha visto nombrar a un hombre director de policía por tener una barba bonita o una preciosa calva?".

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