Sindicatos, vecinos y consumidores se oponen al cierre de camas para crónicos y terminales en la Malva-rosa

El plan de cierre de camas destinadas a enfermos crónicos y terminales "que se ejecutará próximamente" en el hospital de la Malva-rosa de Valencia privará a los usuarios de la sanidad pública de un recurso asistencial básico, según la Plataforma para la Mejora y Defensa de la Sanidad Pública Valenciana.Esta entidad, que agrupa a los sindicatos UGT y CC OO, a la Unión de Consumidores de la Comunidad Valenciana y la Federación de Asociaciones de Vecinos de Valencia, entre otras, hizo público ayer su rechazo a los planes que la consejería tiene reservados al hospital de la Malva-rosa, de potenciar la actividad quirurgica del centro y reducir la asistencia a crónicos. La asociación señaló que el destino que se les abre a los pacientes actualmente hospitalizados es el de acabar en "residencias de ancianos privadas o de Cáritas" que "han de gestionar los familiares de los enfermos porque los servicios sociales no ofrecen ninguna solución".

Esta asociación mostró su recelo hacia las promesas de la consejería de reformar la oferta asistencial del centro y solicitó a Sanidad la convocatoria urgente de un consejo de salud extraordinario -órgano de participación del departamento que dirige José Emilio Cervera-. "No entendemos cómo no se han presentado los planes del hospital en el único foro de participacion ciudadana", señaló ayer Antonio Pla, representante vecinal.

El PSPV también ha denunciado la intención de Sanidad de reducir la atención a crónicos y terminales de la Malva-rosa. La diputada María José Mendoza ha presentado preguntas parlamentarias en las que solicita al Consell información sobre la actividad del hospital, las unidades destinadas a enfermos crónicos y la política de Sanidad en materia de terminales y crónicos. Mendoza criticó ayer la falta de criterio que, en su opinión, muestra el Consell en la atención a este tipo de enfermos y el incumplimiento de programas asistenciales anteriores.

Sanidad replicó que las camas de la Malva-rosa no se cerrará hasta que el antiguo hospital Sanjurjo, junto al Dr. Peset, sea habilitado para enfermos crónicos.