Teoría del absurdo
A los niños se les endosa una multa de 50.000 pelas por jugar con pistolas de juguete, a un policía le meten al talego tres años por falsificar un documento para evitar el pago de la grúa, a un joven se le condena por sacar 100.000 pesetas con la tarjeta de crédito de su padre. A un violador se le reduce -sin haberlo solicitado- la condena de 19 a 6 años porque el día de los hechos estaba ebrio, a un asesino también se le reduce la pena porque después de asestar 70 puñaladas a la víctima se considera que no hubo ensañamiento.La lista de casos de este tipo sería interminable. Se puede aducir que se está aplicando estrictamente la ley. Correcto, pero quién aplica el sentido común. Las normas están para ser cumplidas, pero sería conveniente un mínimo de flexibilidad y de raciocinio a la hora de interpretarlas, y modificar o derogar las normas que den lugar a sucesos como los comentados anteriormente. En caso contrario, entramos en la teoría del absurdo de difícil comprensión y menor aceptación por parte de los ciudadanos que componen una sociedad civilizada pero injusta.-
