Naturalidad

Entre tantas noticias cargadas de violencia, lo grato, cuando además es apacible, es un gran consuelo. Estos días pasados, una mujer sevillana nos ha demostrado que la fama y el éxito, nada más y nada menos, se pueden alcanzar y recibir con sosiego, y por eso estamos todos encantados, por eso no despierta apenas envidias ni alimenta resentimientos, porque se nota que no ha pasado por el camino de la vorágine y la obsesión por llegar a la cumbre a cualquier precio, sino que le ha llegado el premio a su esfuerzo con la misma naturalidad con que lo ha recibido, y hemos podido alegrarnos con su alegría y descansar la tensión con su frescura y su afabilidad.Su actitud en la ceremonia de la entrega de los goyas no ha sido representación dramática sino la forma que tiene de estar en el mundo, de vivir la vida. Claro que se trata de alguien con las necesidades y más de un capricho cubiertos, pero aun así, muy poca gente se permite el lujo de aceptar lo que llega día tras día lo más plácidamente posible, con un sentido práctico ilustrado, con el mismo interés por lo mundano que por la ciencia, tan lejos de las modas y las grandes palabras como cerca de los demás, sin escatimar esfuerzos y poniendo en cada tarea lo más auténtico de sí misma.

Creo que la popularidad del goy de María se debe, entre otras cosas, a que en lugar de generar violencia, como tantas otras cosas a nuestro alrededor, predispone a la generosidad. Me imagino que alguna que otra vez habrá recibido agresiones, como todo el mundo y como siempre, pero en la imagen que transmite no quedan rencores, ni arrogancia, ni cadáveres de enemigos por pasar, porque hay cosas más importantes en las que ocupar el tiempo presente y lo único que nos puede salvar es nuestra propia dignidad. Y eso se le nota desde lejos en la expresión de los ojos, en el tono de voz y en las palabras.

Dos cosas importantes me quedan que decir: la primera es que, como profesora, Galiana transmitirá su actitud a los alumnos, y la segunda es que, también con la mayor naturalidad, tiene un marido estupendo, y ese marido lloró el día de los goyas de emoción.

BEGOÑA MEDINA