La juez imputa a Gil y a su mujer alzamiento de bienes y delito fiscal

La juez de la Audiencia Nacional Teresa Palacios, que sustituye accidentalmente al juez del caso Atlético, ha imputado a Jesús Gil y a su mujer, María de los Ángeles Marín, un presunto delito de alzamiento de bienes y otro contra la Hacienda Pública y les ha citado para el próximo día 10. En un auto dictado ayer, la juez expone que con posterioridad a la interposición de la querella contra Gil, en julio pasado, el ex presidente del Atlético otorgó capitulaciones matrimoniales junto con su esposa el 6 de octubre de 1999, pasando a regirse el matrimonio por el régimen de separación de bienes.

El 26 de octubre de 1999, días después de que se practicasen diversos registros en las empresas de Gil, éste celebró con su esposa junta universal de accionistas de la sociedad promotora inmobiliaria La Alhambra, acordándose "por unanimidad" que la administración única pasase de Gil a su esposa.

Según el fiscal, en 1995 Gil había registrado sus acciones del Atlético, -el 85% del total-, a nombre de la promotora La Alhambra. Así, la promotora La Alhambra sería ahora titular formal de 211.987 acciones, que representan el 85% del capital; Jesús Gil, 1.235 acciones, el 0,5 % del capital, y Enrique Cerezo, titular de 23.507 acciones, 9,46% del capital.

Según la fiscalía, todo parece indicar que después de iniciado el procedimiento judicial, Gil y su esposa otorgaron capitulaciones en las que pactaron cláusulas tan indeterminadas que les permitieran atribuir frente a terceros la titularidad de los que fueron bienes gananciales, o a uno u otro cónyuge en función de las circunstancias del momento.

La juez Palacios coincide con el fiscal en que esta actuación "podría hacer ilusorias las medidas cautelares ya adoptadas o que pudieran adoptarse" contra Gil, por lo que acuerda llamar a declarar al matrimonio y les prohíbe disponer de las acciones de La Alhambra y se les ordena que entreguen los títulos en el plazo de dos días. También les imputa un supuesto delito contra la Hacienda Pública por no haber tributado por el impuesto de sociedades a través de la Alhambra ni por el IRPF.

Réplica de Gil

Tras conocer esta nueva imputación, el ex presidente atlético replicó que la Fiscalía, en su "afán de linchar a Gil", ha relatado hechos que "no se ajustan a la realidad". Según Gil, las acciones del Atlético figuran en los registros y archivos del club desde 1995 a nombre de promotora La Alhambra , "constando asimismo en los registros del Consejo Superior de Deportes, de la Liga de Fútbol Profesional y de la Comunidad de Madrid".

Gil asegura que el administrador Rubí "quedó enterado de esta circunstancia el pasado martes" y añade que no puede haber alzamiento de bienes al no haber perjuicio de acreedores, ya que las capitulaciones se hicieron "correctamente" y las acciones no han cambiado de nombre. "Ya sólo falta que imputen a mi hijo pequeño y a Imperioso [su caballo]", concluyó.