Antonio Colinas reflexiona en un libro sobre el mal, la naturaleza y la familia

Una de las funciones de la literatura es la de servir como terapia en los momentos de crisis. Con esa intención escribió el poeta Antonio Colinas (La Bañeza, León, 1946) un Nuevo tratado de armonía (Tusquets). El poeta acababa de abandonar la isla de Ibiza, en la que ha vivido durante 21 años, y atravesaba uno de los momentos más críticos de su vida, tras la muerte de un familiar, cuando su editora le aconsejó escribir el libro a modo de tratamiento.

El anterior Tratado de armonía se publicó también en Tusquets en 1991, pero la novedad en este libro, según explica Colinas, es que aparece la idea del mal como sentido cósmico. "Vivimos plenamente y, de repente, nos asalta este mal, que se puede manifestar de diversas formas y que hay que neutralizar por la vía de la armonía o de la plenitud", añadió el escritor la pasada semana durante una estancia en Madrid.El autor de Libro de la mansedumbre repite el mismo esquema del anterior tratado y compone su nuevo trabajo a base de aforismos, poesía en prosa y pensamientos. Todo ello hilvanado en torno a sucesos de todo tipo, como la lectura de un libro en el que se reconoce, el encuentro con un amigo, aquello que nos complica la vida, la enfermedad o el abismo de un acantilado "de una belleza infinita". La familia y la presencia de la naturaleza, dos constantes en toda la obra de este autor, que ha publicado poesía, novela, cuentos y ensayos, también están presentes en su nuevo trabajo.

Colinas explica así la concepción de su Nuevo tratado de armonía: "Cerré los ojos, hice el vacío dentro de mí y fueron surgiendo como fragmentos o fogonazos estos textos, que en principio parecen aislados pero que luego tienen una trama y en ellos se cuenta una historia". El poeta reconoce también que se trata de un libro raro y a contracorriente, aunque sintoniza con las exigencias de los nuevos tiempos, muy cercanos con los problemas ecológicos y con el humanismo.

Para este escritor, que ha tocado todos los géneros literarios, todos sus libros tienen un sustrato poético. Como Machado, Colinas cree que la poesía es palabra en el tiempo. Su idea es que a los poetas no siempre les hacen los antólogos, las generaciones o la actualidad. "Un poeta es esa persona que en la soledad de su cuarto se enfrenta a una cuartilla en blanco e intenta expresarse".