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Las pruebas de diagnóstico en el Insalud tardan hasta 90 días

El retraso hace que las urgencias de los hospitales estén saturadasEste año tiene previsto empezar a construir 24 centros de salud y reformar otros tres

La lista de espera máxima de las pruebas de diagnóstico (las que ordenan los especialistas para conocer con precisión la patología de un paciente, tales como una mamografía, un escáner...) se acerca en Madrid a los tres meses. Es decir, desde que un paciente acude al especialista y éste tiene en su poder las pruebas necesarias para emitir un diagnóstico pueden pasar hasta tres meses. "Es la asignatura que tenemos pendiente", admite el presidente ejecutivo del Insalud, Alberto Núñez Feijoo, quien subraya: "Nuestro objetivo es reducirlo a dos meses".Núñez Feijoo precisa que tres meses es la "demora máxima" que están tardando las pruebas de diagnóstico "no urgentes". "Las que son urgentes deben hacerse sobre la marcha", señala.

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Esta tardanza, según fuentes sanitarias, es la responsable de que los servicios de urgencia de buena parte de los hospitales estén saturados. Muchos pacientes optan por presentarse en las urgencias para intentar mitigar la inquietud que les genera tener que esperar hasta 90 días antes de que el especialista pueda emitir un diagnóstico y proceder posteriormente a tratar la dolencia.

En las urgencias de los hospitales Severo Ochoa, de Leganés, y La Paz, de Madrid, se han producido durante la pasada semana auténticos atascos, con enfermos encamados en los pasillos, a la espera de que se les asignase una habitación.

Según Núñez Feijoo, la presión asistencial en las urgencias de Madrid "no es superior este año a la registrada el pasado". Para afrontar este aumento de demanda asistencial, derivada en parte de los procesos gripales, "se han habilitado 28 camas en otros hospitales (14 en el de la Cruz Roja y otras 14 en el de Santa Cristina", apunta. La Paz, por ejemplo, lleva varias semanas atendiendo en sus servicios de urgencias medio millar de pacientes al día.

El Insalud asegura que "ningún paciente espera más de seis meses" para ser operado

Para aliviar la presión asistencial que aqueja actualmente al hospital Severo Ochoa, de Leganés, el Insalud ha empezado ya las obras de ampliación de este centro, que dispondrá de otras 40 camas, y de un nuevo centro de especialidades y atención primaria, el de Los Pedroches, situado éste en el barrio de Zarzaquemada.La inversión ronda los 2.000 millones de pesetas. Estas obras concluirán, según Núñez Feijoo, dentro de 18 meses, y permitirán descongestionar el centro hasta que entre en funcionamiento el futuro hospital de Fuenlabrada, que estará equipado con 350 camas. "Una vez que funcione el nuevo hospital de Fuenlabrada, quedará perfectamente cubierta la asistencia sanitaria en la zona sur de Madrid", puntualiza el responsable del Insalud.

Aunque el Insalud admite que la lista de espera de las pruebas de diagnóstico es su "asignatura pendiente", se muestra "muy satisfecho", en cambio, con la evolución de las listas de espera quirúrgicas. "En junio de 1996", señala Núñez Feijoo, "teníamos unos 22.000 pacientes que llevaban más de seis meses esperando para entrar en el quirófano; en la actualidad", afirma, "la lista es cero; es decir, ningún paciente espera más de seis meses". El presidente del Insalud no especifica, en cambio, cuántos enfermos se ven obligados a esperar entre tres y seis meses para acceder al quirófano.

Cirugía ambulatoria

El mayor rendimiento de los quirófanos, la constitución de equipos médicos que operan por las tardes las patologías más comunes, y la potenciación de la llamada cirugía mayor ambulatoria son algunas de las circunstancias que han permitido la reducción de las listas de espera quirúrgica.

La cirugía ambulatoria, destinada a enfermedades de escasa complejidad, permite al enfermo acudir por la mañana al hospital, someterse a la operación y, si no surge ninguna complicación, puede regresar por la tarde a su domicilio. Según Núñez Feijoo, los hospitales madrileños efectuaron durante el año 1999 un total de 36.000 intervenciones de este tipo, un 95% más que en 1996.

"Esto permite liberar camas y dejar las que hay para los casos graves", razona el presidente ejecutivo del Insalud, quien añade que otro de los factores que han contribuido a descongestionar en parte los hospitales ha sido la reducción de la estancia media de los enfermos. "Si en 1996 esa estancia se situaba en casi diez días, en la actualidad es de 8,36 días", destaca.

Núñez Feijoo señala que, aparte de los 24 centros de salud que han sido construidos en los últimos tres años en Madrid, está previsto empezar a edificar otros 24 durante este año y reformar tres de los ya existentes en la Comunidad. El monto de inversión previsto en centros de salud supera los 10.224 millones de pesetas. "En esta legislatura", señala el presidente del Insalud, "vamos a gastar en Madrid un total de 64.580 millones de pesetas, y aún resta por invertir otros 20.000 más".

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