Exteriores llevará a Kosovo la ayuda de Málaga con cinco meses de atraso

El pasado verano, la Junta organizó en Málaga una recogida de medicinas, ropa y alimentos no perecederos para ayudar a las víctimas de la guerra de Kosovo. Reunieron 180 toneladas que se almacenaron en el puerto. El Ministerio de Asuntos Exteriores debía encargarse del envío, pero cinco meses después la mayoría de estos productos envejecen en una nave. La Junta ha exigido a Exteriores que envíe la ayuda. El ministerio asegura que el cargamento ya está "listo para salir".

La campaña de recogida fue coordinada por la Delegación de Asuntos Sociales en Málaga. Colegios, asociaciones de vecinos y colectivos sociales se encargaron de la recopilación de los productos y la delegada de Asuntos Sociales, Ana Paula Montero, pidió al presidente de la Autoridad Portuaria, Enrique Linde, una nave del puerto de la capital para almacenar la ropa, medicina y alimentos hasta el momento del envío.La nave fue desinsectada y desratizada. Los alimentos no perecederos fueron catalogados según exigen las normas internacionales y se almacenaron a principios del verano. El siguiente paso, su envío a Kosovo, dependía del Ministerio de Asuntos Exteriores, que debía asignar el envío a alguna ONG y encargarse de supervisarlo.

Pero pasaron semanas y no hubo ningún movimiento más en la nave. El puerto de Málaga no está sobrado de naves de almacenamiento, así que Linde solicitó por escrito a Montero que se agilizara el envío. La Junta hizo algunas gestiones con Exteriores pero no tuvo éxito. Ante la falta de respuesta, el 27 de julio pasado, el Gobierno autonómico fletó dos camiones con 20 toneladas de productos rumbo a un campo de refugiados de Kosovo. Las otras 160 toneladas quedaron en la nave.

Peligro de deterioro

Pasaron algunos meses y nadie acudió a llevarse esta partida de productos. A la molestia que suponía para el puerto el tener una nave inutilizada se sumaba la posibilidad de que algunos alimentos y medicinas se deteriorasen en el almacenaje.

Finalmente, el consejero de Asuntos Sociales, Isaías Pérez Saldaña, tomó parte en el asunto y dirigió una carta al Ministerio de Asuntos Exteriores conminándolo a que se llevara el cargamento. También se preguntaba si había ayuda en otros lugares de la comunidad en las mismas condiciones.

Asuntos Sociales está dispuesto a hacerse cargo de los víveres si el Ministerio no se los lleva inmediatamente: "Si Exteriores no saca el material en una semana, la Junta lo llevará a Kosovo como hizo con las 20 toneladas que se mandaron en verano", señaló ayer un portavoz de la Consejería.

En el Ministerio aseguran que no hará falta. "El problema era que no estaba claro qué ONG se iba a hacer cargo del transporte, hubo una confusión y falta de claridad acerca de quién y cómo se tenía que encargar del envío", dijo ayer un miembro de la Oficina de Información Diplomática, que añadió que finalmente se le ha atribuido el encargo a la Cruz Roja. "El material ya ha sido inspeccionado y saldrá próximamente", concluyó.