Cabanillas no facilita al Congreso la investigación del supuesto borrado de cintas que el PP imputó al PSOE

El director general de RTVE, Pío Cabanillas, rehusó ayer avanzar datos sobre la investigación abierta en el ente público (hace dos meses) sobre los archivos de la televisión pública y sus sistemas de control. "He pedido en repetidas ocasiones que esta casa no se convierta en campo de batalla y no daré la oportunidad de que mis palabras se instrumentalicen en este contexto", dijo el director general durante la sesión de control celebrada en el Congreso de los Diputados. Cabanillas precisó que cuando esté el resultado, lo hará público.Esa investigación -que Cabanillas calificó de "muy importante" porque con ella se intenta "salvar la credibilidad de la casa"- se abrió tras la polémica que suscitó el portavoz del PP, Rafael Hernando, al denunciar que entre el 3 de marzo y el 6 de mayo de 1996 (cuando se produjo la transición del PSOE al PP en la dirección de RTVE) se habían borrado imágenes de los archivos "que podrían ser molestas" para el anterior presidente del Gobierno, Felipe González.

Hernando hizo tal denuncia a principios de octubre. Aunque Cabanillas no reconoció abiertamente que las imágenes supuestamente borradas existían, trabajadores del ente público aseguraron días más tarde que esas cintas estaban en el archivo de RTVE. El diputado socialista Luis Alberto Aguiriano reclamó ayer a Cabanillas que se dirija a Hernando para que, "por el buen nombre de RTVE y sus trabajadores", éste "reconozca al menos que había sido mal informado", pero el director general no le respondió.

En contestación al diputado Alejandro Ballestero, del PP, el director general expuso el modelo de Consejo de Control que desea para el ente público, un órgano destinado a sustituir al actual Consejo de Administración y para el que propuso la denominación de Consejo Rector de TVE. Sus funciones serían las de controlar y supervisar la marcha de la radio y la televisión estatal. La gestión y administración correspondería al director general que, en opinión de Cabanillas, debería llamarse presidente; así como al Comité de Dirección del ente público, en el que deberían entrar "los representantes de los trabajadores".

El presidente de RTVE podría ser elegido por el Congreso, a través de una propuesta formulada por el Gobierno, por mayoría simple. El actual director general propone que el mandato del presidente dure cinco años -argumentando que ello reforzaría su independencia-. Para que pueda aprobarse su cese por el Congreso propone, por el contrario, una mayoría de dos tercios del Congreso.

Freno en la subcomisión

Horas antes de esta sesión de control, la subcomisión que estudia el modelo de RTVE tampoco había llegado a ningún consenso. A la reunión, prevista para votar el texto definitivo, no asistieron los socialistas -ausentes de este foro desde hace meses-, pero tampoco los representantes de IU y PNV. El PP anunció una próxima reunión para mañana, ya que su grupo no ha tenido tiempo de analizar las enmiendas de CiU. El PP sólo cuenta, de momento, con el apoyo de Coalición Canaria. El diputado de Nueva Izquierda, Manuel Alcaraz, en nombre del Grupo Mixto, criticó todo el modelo presentado por el PP.